La cantante Katy Perry vivió un momento sumamente bochornoso este domingo en la alfombra roja de los iHeart Radio Music Awards, tras darse cuenta de que había posado muy sonriente frente a los fotógrafos con un trozo de comida entre los dientes. Lo que más ha molestado a la estrella, sin embargo, es que ninguno de sus acompañantes se atreviera a avisarle lo que estaba pasando.
“Ahora mismo estoy aceptando solicitudes para encontrar amigos de verdad a los que no les dé miedo decirme que tengo algo de quinoa entre los dientes”, anunció la intérprete en su cuenta de Instagram junto a un primer plano suyo a la entrada del evento que demuestra que, en efecto, no se había enjuagado la boca tan bien como ella pensaba.