México.- Luis Miguel no pudo despedirse de Colombia sin antes probar su gastronomía. El Sol fue captado cenando en un exclusivo restaurante, con el que tuvo un gran detalle.

El pasado fin de semana, “El Sol de México” ofreció dos conciertos en el Coliseo MedPlus, en Bogotá, Colombia, donde fue bien recibido por sus fans.

No cabe duda que quiso aprovechar su estadía en Bogotá Colombia para cenar en el reconocido restaurante de la capital colombiana, La Cabrera, donde permaneció hasta las 2 de la madrugada.

Pero no solo eso, el intérprete de “Hasta que me olvides” firmó uno de los platos del lugar que cuenta con un rincón de la fama con firmas de las celebridades que lo visitan.

El Sol tuvo un gran gesto con el restaurante, firmó un plato que fue colocado en un rincón de la fama. Foto: Especial.

¿Con quién llegó Luis Miguel al restaurante en Colombia?

Una empleada del restaurante La Cabrera compartió a medios de comunicación que Luis Miguel llegó al lugar en compañía de amigos y parte de su equipo de trabajo.

Dijo que entre sus amigos iba Maluma, quien asistió junto a su madre, Marlli Arias, al primer concierto.

La empleada dijo que el Sol se portó amable con el personal que lo atendió en la terraza del lugar.

El Sol es amante de los vinos. En la postal, en un viaje en jet privado. Foto: Especial.

¿Qué platillos degustó Luis Miguel?

Se dio a conocer que entre los platos que probó el cantante están las cazuelas, unas preparaciones típicas de La Cabrera, que contienen espinaca, manzana, ajos caramelizados, creme brulé, puré de papa, coliflor, entre otros ingredientes.

También pidió un tomahawk, que es un corte de carne muy jugoso y de gran tamaño, y una ensalada. 

Para beber, ordenó una botella de vino tinto de alta gama.

Luis Miguel pidió un tomahawk, que es un corte de carne muy jugoso y de gran tamaño. Foto: Especial.

Luis Miguel se pone espléndido son meseros

Según medios, la cuenta que pagó Luis Miguel ascendió a más de cuatro millones de pesos colombianos, lo que equivale a unos mil dólares. 

Sin embargo, el cantante no escatimó en propinas, y dejó un generoso porcentaje para los meseros que lo atendieron.

No solo eso, también se tomó fotos con algunos empleados y comensales que lo reconocieron.

Luis Miguel se fue del restaurante muy satisfecho y agradecido por la atención recibida, y se dirigió a su hotel para descansar. Al día siguiente, ofreció su segundo y último concierto en Bogotá, donde se conmovió por el cariño de sus fans, que le mostraron carteles con mensajes de admiración y gratitud.

El mejor cantante de habla hispana de la historia”, “¿Y por qué tan solo?”, “ Que suertudos los que laboran en ese restaurante, una bendición estar a su lado”, reaccionaron fans a la visita del cantante al restaurante.

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