León, Guanajuato.-El actor Mario Moreno Cantinflas se enamoró de Guanajuato y San Miguel de Allende, en éste último, tenía una lujosa casa y un hotel que hoy en día también es un museo con toda la pictografía de sus obras.
Cantinflas grabó varias de sus películas en la capital y San Miguel de Allende.
Una de ellas, fue la de El Anafalbeto, dirigida por su amigo Miguel M. Delgado, con quien sentía gran libertad de trabajar, pues nunca le cuestionaba que improvisaba o utilizara su afamado cantinfleo.
Fue en 1961, cuando el equipo se trasladó a algunas locaciones de la capital, entre las que se encuentran: La Universidad de Guanajuato, el Teatro Juárez, el Jardín Principal, la Basílica de Nuestra Señora de Guanajuato, entre otras calles.
En el Analfabeto, Cantinflas es Inocencio Prieto y Calvo, un hombre huérfano, analfabeto y pobre. Su vida cambia cuando su tío Prisciliano, fallecido en Texas, le heredó una fortuna millonaria. Sin embargo, cuando recibe la carta del notario, no sabe leerla y su orgullo le lleva a inscribirse en la escuela pública. De ahí se desencadena una serie de acontecimientos que sin duda cambiarán su vida.
La historia se desarrolla entre callejones, plazuelas y puntos turísticos que no han cambiado mucho.
En las fotos se ve cómo pasa por la Calle Ayuntamiento, para ir en busca de su inscripción a la escuela.
La película aborda el problema del analfabetismo en México, justo en el periodo de expresidente de México Adolfo López Mateos; Mario Moreno lanza su crítica en la cinta, y cómo las personas pueden superar sus limitantes con mucho trabajo.