México.- Desde el año 2021, la conductora y actriz Verónica Toussaint enfrentó una despiadada batalla contra el cáncer de mama que lamentablemente le arrebató la vida el pasado 16 de mayo de 2024.
Verónica Toussaint tenía solo 48 años y unas inmensas ganas de seguir viviendo y haciendo lo que más le gustaba, que era la conducción y la actuación, pero esta terrible enfermedad no se lo permitió.
Durante los tres años que la conductora del programa “¡Qué importa!” (Imagen Televisión) lidió con los debilitantes tratamientos contra el cáncer de mama, siempre habló abiertamente del tema.
Uno de sus mayores temores era perder su cabello, como consecuencia de las quimioterapias recibidas contra el cáncer de mama, pues no quería verse desmejorada ni parecer una víctima de la enfermedad.
De modo que Verónica Toussaint recurrió a un método conocido como sistema de enfriamiento del cuero cabelludo, con el uso de un casco frío, para lograr conservar su cabello y por ende, su apariencia habitual en la televisión.
En una entrevista con Gustavo Adolfo Infante para el programa “El minuto que cambió mi destino“, Verónica Toussaint compartió lo importante que fue para ella mantener su apariencia durante la quimioterapia.
Usé un casco frío porque el tema del pelo es muy personal. Hay muchas personas que dicen ‘ya, es solo pelo, te lo rapas y ya crecerá’, pero verte en el espejo y verte enfermo es lo que marca la diferencia”, explicó la conductora en aquella ocasión.
Toussaint había decidido años antes raparse el cabello por elección, pero durante su tratamiento oncológico optó por utilizar el casco frío para no perderlo.
No quería sentirme enferma. Desde que recibí el diagnóstico, decidí que tenía un tumor de cáncer, pero no estaba enferma. No quería que me vieran como una víctima”, recordó.
La actriz de cine y de doblaje de voz, detalló su experiencia, mencionando que usaba el casco frío una hora antes y cuatro horas después de cada sesión de quimioterapia. Además, complementaba el tratamiento con bolsas de hielo y cuidados especiales para su cabello, evitando peinarse para reducir la caída.
“Ver cómo se cae el cabello es muy fuerte, es una cuestión muy personal”, dijo Toussaint, enfatizando la importancia de conservar su autoestima durante su batalla contra el cáncer.
¿Qué es el casco frío y cómo funciona?
De acuerdo con la Sociedad Americana de Cáncer, los cascos fríos, también conocidos como sistemas de enfriamiento del cuero cabelludo, son dispositivos diseñados para reducir la caída del cabello en pacientes sometidos a quimioterapia. Estos cascos enfrían el cuero cabelludo antes, durante y después de las sesiones de quimioterapia.
El casco frío funciona mediante vasoconstricción y la disminución del metabolismo en las células del folículo piloso:
- -Temperatura Reducida: El casco baja la temperatura del cuero cabelludo a aproximadamente 18-22 grados Celsius.
- – Vasoconstricción: La baja temperatura contrae los vasos sanguíneos del cuero cabelludo, reduciendo el flujo sanguíneo.
- – Reducción Metabólica: La actividad metabólica de las células del folículo piloso disminuye.
- -Protección del Folículo: Esta combinación limita la cantidad de fármacos quimioterapéuticos que alcanzan los folículos pilosos, disminuyendo así el daño y la caída del cabello.
Eficacia y Costos del Casco Frío
La eficacia de los cascos fríos puede variar según el tipo de quimioterapia y el protocolo específico, pero muchos estudios han demostrado una reducción significativa en la pérdida de cabello, lo que mejora la calidad de vida y el bienestar emocional de los pacientes durante el tratamiento.
En México, el costo de los cascos fríos puede variar. Alquilar uno puede costar entre 3 mil y 7 mil pesos por sesión, mientras que comprar un sistema completo puede oscilar entre 50 mil y 120 mil pesos. Algunos seguros médicos pueden cubrir parte del costo del tratamiento, por lo que es recomendable consultar las condiciones específicas de cada póliza.