León, Guanajuato.- Tras casi 10 años de ausencia, Maná regresó con su tour “México, lindo y querido” a León, un sitio que los vio nacer como artistas cuando eran Sombrero Verde.

Fher Olvera en la voz, Alex González en la batería, Sergio Vallín en la guitarra, Juan Calleros en el bajo y Juan Carlos Toribio en los teclados, aparecieron sobre el escenario de la Explanada de la Feria a las 9:45 de la noche para iniciar con la canción “Manda una señal“.

Fher se acordó de los buenos momentos que ha pasado en León. Foto: Gerardo García

León, nos da mucho gusto regresar a una ciudad que veníamos a ver cuando éramos Sombrero Verde, vamos a echar toda la carne al asador, esta canción la escribí y la tocamos con Carlos Santana”, dijo Fher a modo de saludo antes de “Corazón Espinado” y “Labios compartidos“.

“Lo que viene es de nuestros primeros álbumes, veníamos tocando el tema del respeto a nuestra madre tierra, gente que ama la tierra, el sol, la naturaleza, no les podemos dejar un planeta hecho un desmadre”, prosiguió el vocalista para interpretar “¿Dónde jugarán los niños?”. Mientras eso ocurrió, una réplica de elefante apareció en escena y Alex aporreaba la batería.

Maná comenzó el show con “Labios compartidos” y “Corazón espinado”. Foto: Gerardo García

Ante más de 9 mil seguidores, Maná llegaron los momentos del recuerdo; Sergio tomó su guitarra acústica y Fher sacó de su bolsillo una armónica.

“Esta que viene es especial para nosotros, recordamos mucho a León, veníamos casi cada 6 veces al año, y hasta a bodas, y terminábamos en los maizales. Le platicaba a mi doctor Baltazar que es de otra generación, todo lo que hacíamos, del Jardín de las Aves. Esta canción es ‘Vivir sin Aire‘”, recordó Fher.

Después, Maná dedicó una canción a las mujeres que pagan mal. Fernando Vallín dijo que todas eran traicioneras, menos las de León y así presentaron “Mariposa traicionera”.

Cada miembro de Maná se entregó a su público de León. Foto: Gerardo García

Honran al ‘Rey’

La gira “México, lindo y querido” aglutinó varios homenajes, entre ellos a José Alfredo Jiménez.

Hace tiempo grabamos un disco, un homenaje a uno de mis compositores favoritos, era el Unplugged donde tocamos canciones de José Alfredo Jiménez”, enseguida sonó “Te solté la rienda“, que fue una de las más cantadas.

De pronto, Fher reprendió a un fan que estaba bostezando en pleno concierto: “A ver güey, ¿te paso un jugo verde o qué? Nadie bosteza y menos en un concierto de rock”, le reprochó.

La canción “Te lloré un río” trajo recuerdos de cuando la banda grabó el video en San Miguel de Allende.

También hubo espacio para que la banda agradeciera a fundaciones como “Niño por niño” por su trabajo en pro de las infancias, otra de sus preocupaciones.

Un momento emotivo llegó cuando Fher habló de los seres que están en otro plano, pero nos observan desde ahí como estrellas: “Reloj Cucú” provocó las lágrimas no solo en el vocalista, sino también en su público.

Entre el público que acudió a ver a Maná, destacaron la alcaldesa de ciudad Alejandra Gutiérrez y el presidente del Club León, Jesús Martínez, quienes ocuparon lugar en las primeras filas.

Parte del público que acudió al concierto de Maná. Foto: Gerardo García
El presidente del Club León, Jesús Martínez. Foto: Gerardo García

Las clásicas

Una mujer tuvo la oportunidad de subir al escenario y, aunque no dominaba la canción, como pudo cantó “Bendita tu luz“, a la que siguieron las clásicas: “Eres mi religión“, “Ay, Doctor“, “Me vale” y “Clavado en un bar“.

La agrupación desapareció de la tarima entre sombras, pero apenas unos minutos después regresaron para corresponder con el grito de “¡Otra, otra otra otra!”.

Esta es una de las canciones que cambió nuestras vidas, de nuestros primeros discos”, dijo Fher antes de cantar “Rayando el sol“, con la que además, dieron a entender que en un futuro, sus conciertos ya no serían muchos, por lo que hay que aprovechar estos momentos.

La banda se despidió entre papeles metálicos, pelotas blancas, y el recuerdo de cómo Fher tomó una bandera de México y se envolvió con ella en el escenario.

Maná dejó las clásicas para el final del show. Foto: Gerardo García

CYPS

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