Texas.- ¿La tercera será la vencida? Elon Musk fracasó este sábado nuevamente en su segundo intento de poner en órbita alrededor del mundo al súper cohete Starship, de SpaceX.
Aunque a diferencia del vuelo de abril, que duró cuatro minutos, en esta ocasión el cohete permaneció ocho minutos en el aire y explotó.
Su principal objetivo de ponerlo en órbita alrededor del mundo fracasó, pues, aunque alcanzó el espacio, se perdieron las comunicaciones y estalló el propulsor como en abril pasado.
La nave debía llegar a una altura de 240 kilómetros para tomar la forma de bala alrededor de la Tierra y caer en el Pacífico cerca de Hawai, una hora y media después de su lanzamiento. Aunque sin efectuar la órbita completa.
Sin embargo, para SpaceX fue exitoso el despegue, así como ocurrió en abril.
“Lo más brillante del día, el exitoso despegue”, dijo el comentarista de SpaceX, John Insprucker.
“Logramos sacar muchos datos, y eso nos ayudará a mejorar para nuestro próximo lanzamiento”.
El fundador de Space X, Elon Musk, observó el despegue desde el centro de control en la punta sur de Texas cerca de Playa Boca Chica y la frontera con México.
Los empleados de la empresa en Hawthorne, California, aplaudieron durante el despegue, pero reinó el silencio cuando la nave explotó y cayó junto al propulsor.
(Con información de AP)