Estado de México.- Darién Montoya, de 22 años, estaba desaparecido desde el pasado 10 de marzo en el municipio de Tultitlán; ayer, su cabeza y otras partes de su cuerpo fueron halladas por vecinos, tras alertar de que un perro las mordía.
La víctima fue desmembrada y arrojada a un canal de aguas negras en el Paraje San Pablo de dicho municipio, según autoridades estatales.
Padre reconoce los restos de su hijo por tatuajes
Se sabe que el padre de Darién realizó el reconocimiento ocular de los restos.
El reporte policiaco indica que un cuerpo desmembrado fue localizado por vecinos, luego de que un perro fuera visto comiendo una pierna humana.
Vecinos que vieron al animal, revisaron las inmediaciones del lugar y descubrieron una bolsa con restos humanos.
Tras el hallazgo, se reportó a las autoridades y también a la familia del joven desaparecido, y enseguida el padre de Darién acudió pensando que podría tratarse de su hijo.
En el lugar, el hombre pudo ver la pierna que el perro devoraba, en la que pudo reconocer un tatuaje que su hijo tenía.
Confirman identidad de hombre desmembrado
El padre de la víctima informó a medios locales que luego de reconocer los tatuajes de su hijo, llegó el reconocimiento de la cabeza humana que fue hallada en el mismo lugar, dijo que sí se trataba de él,
Hasta este sábado no hay mayor avance en las investigaciones, falta que se compruebe la identidad de los restos con muestras de ADN, además de no haber pistas todavía para esclarecer el crimen.
(Con información de La Jornada y Agencia Reforma)