Guanajuato, capital – En medio de una profunda tristeza, cientos de personas despidieron al pequeño Iker y a su mamá María de Jesús, durante la misa de cuerpo presente en la Basílica de Nuestra Señora de Guanajuato.

Ambos murieron atropellados por un camión del transporte público en la mañana de este martes en Los Pastitos. 

Entre música de mariachi, aplausos y globos blancos su familia y amigos los despidieron este medio día.

Agentes de las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado (FSPE) montaron una guardia de honor al iniciar la misa, y decenas de personas en general se acercaron a la basílica para unirse a la celebración religiosa.  

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