Justo cuando inicia la temporada vacacional para muchos, se da el cierre de nueva cuenta del balcón

Guanajuato, Guanajuato.- Tras las constantes agresiones a su persona y la falta de actuación de las autoridades municipales, Norma Gámez, propietaria de la Casa de Ana, cerró de manera indefinida, dejando a turistas sin poder visitar el famoso balcón del Callejón del Beso.

A mediodía de este martes 25, quedó cerrado el mítico balcón en el Callejón del Beso de Guanajuato capital.

Dichos actos fueron perpetrados por los trabajadores y fotógrafos del Balcón de Carlos, inmueble situado justo enfrente y que a su vez conforma la leyenda guanajuatense que suelen escuchar los miles de turistas que se dan cita en la zona.

Cabe mencionar que ayer se presentó un conato de bronca y una serie de agresiones verbales hacia uno de los 12 trabajadores que actualmente laboran en el Balcón de Ana, hecho que requirió la presencia de cuerpos policiales del Municipio.

El Balcón de Ana con una manta a manera de protesta por la poca actuación del Municipio, afirman. Foto: Oscar Zárate.  

Minutos antes de que cerrara el Callejón del Beso, sus respectivos promotores advirtieron de la última sesión fotográfica en ambos balcones; poco después el Balcón de Ana cerró sus puertas y colocó una manta color negro con una hoja blanca en la parte inferior con la leyenda “Murió la Ley atte: la propietaria”.

“Se debe a mi seguridad y la seguridad de mi personal, se vuelve a cerrar el callejón después de dos años de tocar puertas y de enviar documentos sin respuesta.

“Hoy mi trabajo es proteger a mi gente y a mi familia, ha habido injusticia en mis derechos humanos y también violencia de género así como mi derecho como empresaria ha sido violentado”, dijo la dueña del Balcón de Ana, Norma Luz Gámez, en exclusiva para AM Express.

En ese sentido, exhortó al gobierno capitalino a aplicar la ley: “cuando hay agresión, no han tomado cartas en el asunto y esto en todos los órdenes de gobierno, incluso a la gente que estuvo en Fiscalización y en Seguridad Pública, quienes no han aplicado los protocolos para mí persona y para mis trabajadores”, expuso Norma Gámez.

“Murió la ley”, se leía en un papel luego del cierre indefinido del mítico balcón. Foto: Óscar Zárate.

CA

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