Habitantes de los callejones de Llanitos de Salgado, del Bosque, Privada de la Rejita y Privada de La Palma se unieron; pusieron el ejemplo para “detener” a los delincuentes, instalaron dos alarmas comunitarias que activan desde controles remoto y que usan de manera personal desde sus casas cuando sienten que hay peligro.
Una vez que activan las alarmas o “chicharras”, como ellos las llaman, los habitantes salen de sus casas y a través de cámaras de video, fotográficas o con sus celulares captan imágenes de las personas sospechosas de haber cometido algún delito o participado en riñas, luego entregan el material a las autoridades para que inicien las investigaciones.
Las alarmas están colocadas en dos puntos estratégicos del callejón Llanitos de Salgado, pero al activarse, el sonido se escucha varias cuadras a la redonda y hasta el edificio de la Policía Municipal.
Apenas el miércoles 19 de junio se anunció la colocación de 20 mil botones de pánico en los 46 municipios, en edificios públicos, empresas y colonias donde los índices delictivos son altos, pero estos vecinos ya se adelantaron y colocaron su propio sistema de alerta.
Los vecinos son asesorados por la Dirección de Seguridad Ciudadana que encabeza Samuel Ugalde García, con medidas de autoprotección como se ha hecho también con los 36 Comités Vecinales que se han formado en la capital y con el Programa Vecino Vigilante.
Por lo pronto, más de 60 vecinos se sumaron al proyecto y cuentan cada quien con su control remoto que mide unos cinco centímetros, el cual  tuvo un costo de aproximadamente 450 pesos cada uno, la empresa encargada colocó las “chicharras” sin costo alguno.
Sin embargo, no todos los habitantes de la zona han aceptado esta medida de seguridad, pues dicen que no es eficiente.
“La alarma se puede activar con el control remoto, por ejemplo, cuando alguien se sienta perseguido o que esté siendo víctima de un asalto o cuando se esté presentando alguna riña o cualquier otro delito”.
Algunos vecinos adquirieron los controles en pagos otros cubrieron el costo al contado.
“No nos enfrentamos a los delincuentes, no los agredimos, nada más salimos a la calle cuando alguien suena la chicharra y tomamos fotografías a la gente sospechosa, y las fotos o videos los entregamos a las autoridades para que sirva como prueba.
“Son medidas de prevención para ayudar a las autoridades, nosotros como ciudadanos tenemos que poner de nuestra parte”, dijo Martha Jiménez, vecina de Llanitos de Salgado.
En otras colonias
En otros sectores de la ciudad como Púquero, varios vecinos se unieron desde hace meses para instalar cámaras de vigilancia.
Mientras que habitantes de El Ejido planean también unirse al proyecto de la colocación de cámaras de vigilancia.
En zonas como Mexiamora, Plaza de Toros, Marfil, y colonias de la zona sur, han conformado comités vecinales para autoprotegerse de la delincuencia.

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