Un incendio consumió parte de una casa en la comunidad Tepozán en San Felipe.
Aunque se registraron varios daños materiales ninguna persona resultó lesionada, sólo murió un periquito, mascota de la familia.
A María Dolores Pérez Sánchez, de 77 años, “se le quemaron los frijoles” pero literalmente. Dejó la olla en el fogón y salió de su casa; cuando regresó el fuego se había extendido, consumiendo toda su cocina.
Cuando se acercaba a la casa notó una nube de humo que salía de su cocina. Pese al riesgo y con ayuda de familiares y vecinos, sacaron un tanque de gas LP de 30 kilos para evitar que fuera alcanzado por las llamas.
Mientras algunos vecinos contenían las llamas a cubetadas de agua y con arena de una construcción vecina, un familiar de María llamó a los cuerpos de emergencia.
Al lugar acudieron elementos de Protección Civil y Bomberos que sofocaron el incendio, así como la Policía Municipal que apoyaron a la tarea.
Paramédicos de Protección Civil revisaron a los habitantes de la casa, quienes resultaron ilesos tras el incendio.
Deja olla en el fogón y causa incendio
Aunque se registraron varios daños materiales ninguna persona resultó lesionada, sólo murió un periquito, mascota de la familia.