Tras la polémica poda de un árbol en la Escuela Centenario que dejó decenas de crías de garza muertas, la Dirección Municipal de Protección al Ambiente detuvo los trabajos hasta nuevo aviso.
“Estamos parados por lo que se suscitó (la poda de ramas donde había decenas de nidos de garza, ante el descontento de los vecinos) pero seguimos trabajando en otras áreas”, dijo Omar Saldaña.
“Una vez que el director de la escuela “dé su punto de vista”, podrían reanudar los trabajos, pues “fue a petición del directores y de padres de familia que se podó el árbol, porque representa un peligro para los niños”, reiteró.
Mientras tanto, el personal podará otros 134 árboles identificados como ‘de riesgo’.
La semana pasada, durante los trabajos de poda, un grupo de vecinos de la escuela, entonces cerrada por las vacaciones, encaró a los trabajadores de Limpia para que pararan los trabajos pues había crías de aves migratorias.
Los vecinos pidieron reubicar las aves pero no fueron escuchados. Mientras el personal podaba las ramas, los vecinos rescataron una veintena de crías de garza.
En la Escuela Centenario hay otros 28 árboles que “representan un riesgo”, según Protección al Ambiente.

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