La defensa del cerro de La Bufa no se ha olvidado, es un tema que ya forma parte de la vida cotidiana, y ayer en la Feria Ecologista, realizada en el Jardín Reforma, se recordó que “es una zona que debe preservarse para mejorar la calidad de vida”.
“Hace 100 años, La Bufa aún era un bosque que ayudaba a recargar de agua el subsuelo, ahora es una zona deforestada, pero debemos conservarla porque demás, es un bello paisaje”, dijo Ian René Ramos Arroyo, investigador de la Universidad de Guanajuato.
“Ya no capta tanta agua de lluvia, pero es un bello paisaje que debemos defender por ser un patrimonio para nuestros hijos, por eso, no se debe urbanizar”.
“Los dueños están en su legítimo derecho de vender el terreno, pero no debemos permitir que se urbanicen porque sería un verdadero atentado a la vida al limitarse la capacidad de recarga en los mantos acuíferos”.
Dijo también que al construirse en las partes altas de la ciudad aumenta la temperatura y con ello ya no se forman nubes y llueve menos.
Algunos de los asistentes preguntaron sobre cuál sería la forma en que un ciudadano común puede contribuir en la defensa de este cerro; la respuesta fue muy concreta: “alzando la voz, movilizándose, participando en las diversas actividades para que se convierta en área natural protegida”.

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