“Lo más importante es cuidarse entre compañeros para regresar a salvo a casa porque en las comunidades nos reciben a balazos”, relata el oficial Cano, quien forma parte de la Unidad de Reacción Inmediata (URI), grupo de élite de la Policía Municipal.
Desde hace tres años y tres meses forma parte de la corporación preventiva, comenzó su carrera policial en el grupo de la Policía Turística, luego fue asignado para conformar el comando de la Policía Rural, el Operativo Intermunicipal y actualmente integra el URI.
En la Unidad de Reacción Inmediata ha sido adiestrado para incursionar en casas y rescatar a personas y tiene conocimientos en rappel para lo que se necesite, igual que el resto de sus compañeros que forman parte del agrupamiento.
Para formar parte de los grupos de élite de la Policía Municipal tuvo que aprender a usar diferentes tipos de armas de fuego, por ejemplo maneja los fusiles AR-15 calibre .223 milímetros, sabe usar las Ceskas y el Uzi 9 milímetros para poder enfrentar a la delincuencia.
“Pertenecer a la Policía Municipal no es fácil, todos los sabemos porque estamos conscientes de que es un trabajo peligroso, pero nos gusta, aquí estamos, hay que tener mucho valor y saber controlar la adrenalina cuando salen reportes peligrosos.
“Todos los compañeros que trabajan en turnos normales se enfrentan al peligro, quienes formamos parte de los grupos especiales tenemos que estar atentos para apoyarlos y para tratar de llegar primero”, mencionó.
El oficial sabe hacer su trabajo, empezó como todos sus compañeros recorriendo las calles y los callejones a pie, luego lo llamaron para formar parte de la Policía Turística y poco a poco fue integrando los grupos de élite.
Pero no se olvida de sus inicios en la corporación, a lado de sus compañeros recorren la zona bancaria y los callejones para mantenerlos tranquilos, sin embargo, ahora tiene que estar atento para atender los reportes de alto impacto.
Dice que las comunidades son las zonas más peligrosas de la capital, a veces son recibidos a balazos, así la gente trata de ahuyentarlos.
“Cuando vamos entrando a las comunidades escuchamos los balazos, son zonas peligrosas porque no conocemos el camino y eso los delincuentes lo pueden aprovechar para emboscarnos, por eso tenemos que estar atentos, nos tenemos que cuidar, siempre en las patrullas uno de nosotros vigila hacia el frente del camino, otro cubre la espalda y el resto vemos hacia los lados.
“Tienes que estar bien concentrado, tienes que olvidarte de todo durante los reportes de riesgo hay una familia que espera en casa”.

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