El espacio semitriangular tiene un monumento de bronce con base de cantera y mármol hecho para conmemorar el fin de la guerra de Independencia, el cual fue llamado Monumento a la Paz.
La estatua se levantó en 1897 y fue inaugurado el 27 de octubre de 1903 por el presidente de la República Mexicana, Porfirio Díaz.
El encargado de la obra fue el escultor mexicano Jesús Contreras y tuvo un costo de 27, 619,93 pesos.
Alrededor de la Plaza de la Paz se encuentran la Casa del Conde Rul, una construcción de cantera rosa de estilo neoclásico; la casa del historiador, político, empresario, naturalista y escritor Lucas Alamán; también el Palacio Legislativo de estilo neoclásico que se terminó de construir en 1900 y se inauguró el 27 de octubre de 1903, antes de su levantamiento se encontraba la casa del Marqués de San Clemente; además de otras casas de aristócratas de aquella época como la casa de los Pérez Galvez y el Palacio Otero.
Antes del Monumento a la Paz se encontraba la fuente florentina que se instaló en 1852, la primera en la que brotó el agua entubada que venía de la Presa de la Olla y que fue trasladada a la Plazuela del Baratillo en 1893.
En 1886 se construyó un jardín, que fue iluminado con farolas de petróleo. También se aprecia la Basílica Colegiata de Nuestra Señora de Guanajuato, que fue construida entre 1671 y 1696, en cuyo interior se encuentra la Patrona de la ciudad, un obsequio del Rey Carlos I y su hijo Felipe II.
Desembocan en la Plaza de la Paz los callejones de La Estrella, El estudiante y La Condesa, además de las calles Ponciano Aguilar y Luis González Obregón.
La Plaza de la Paz
Es una de las plazas más antiguas de la ciudad, en cuyo centro se erige una estatua de bronce.