Alrededor de 30 vándalos tienen aterrorizada la colonia Cerro del Cuarto, los habitantes de la zona dicen estar desesperados pues los señalan como los responsables de los delitos que se han registrado.
Los vecinos señalaron que el grupo de jóvenes, todos ellos originarios de barrios pertenecientes a esta colonia como La Rosita, Santa Mónica, La Palma, entre otros, están plenamente ubicados, pero hay resistencia a la denuncia porque los buscan en sus hogares para amenazarlos y agredirlos.
Incluso las personas que fueron entrevistadas por este medio, mediante un sondeo para conocer el sentir de las personas afectadas, rechazaron se les tomara foto para respaldar su testimonio, pues aseguraron que en otros casos, cuando la gente decide salir en los medios, los presuntos delincuentes van y los amenazan en sus domicilios.
En esta zona lo común es que a diario, pero sobre todo por las noches, se reúnan al menos 30 jóvenes, que supuestamente consumen enervantes y luego roban y asaltan.
“Ya no se sabe ni qué con ellos, son los mismos de aquí y ya cuando andan tomados no les importa te roban, te asaltan, si viene la Policía no los dejan llegar, los apedrean, se brincan entre las casas para escapar, y hasta han golpeado a gente que los saca de sus casas y los entrega”, dijo María Yolanda, una mujer de 38 años, madre de tres hijos y con 15 años viviendo en la zona.
Los vecinos dicen estar desesperados porque la situación cada vez se complica más, ya que la vigilancia policíaca en la zona no existe y se concreta sólo a un elemento asignado a la caseta de vigilancia en la misma colonia.
“Seguido apedrean y le tiran botellazos a la caseta que hay y si alguien de los vecinos se mete y denuncia, luego, luego los buscan en bola para golpearlos”, afirmó Rubén, un habitante nacido en esta colonia.
Los fines de semana, pero especialmente por las noches, la zona se transforma en una especie de territorio sin ley, ya que es cuando se registra la mayor cantidad de robos y asaltos, con hasta cuatro en promedio en sólo unas horas.
Incluso han recurrido a solicitar el apoyo del Ejército Mexicano, pero hasta ahora no los han atendido, mientras la situación cada vez se complica más.
Aseguraron que no quieren acostumbrarse a vivir en medio de la violencia, pero la indiferencia de las autoridades ocasiona que no haya denuncias y que los vecinos busquen formas de protegerse por su cuenta.

Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *