Vecinos y miembros del Colectivo Conciencia Ambiental (Cocoa) se manifestaron en la escuela Centenario por las podas que emprendieron trabajadores de un vivero contratado por la Dirección Municipal de Protección al Ambiente.
Los quejosos aseguran que las podas son injustificadas, pues no sólo se tiran las ramas secas sino que algunos árboles se quedan sólo en el tronco; mientras, las autoridades municipales no han dado declaraciones al respecto.
En videos difundidos en redes sociales, los manifestantes increpan a los trabajadores de poda, quienes dicen sólo haber recibido la orden de podar siete árboles de la escuela, contratados por Protección al Ambiente, a cargo de Omar Saldaña Díaz.
Se observa que uno de los vecinos exige hablar con el responsable, quien se niega a dar la cara, “yo no tengo cara”, dice. También se increpa a personal de la escuela quien reniega hablar con los manifestantes, “hagan lo que quieran”, les dice y les da la espalda.
En otro video, en el que se observa una pila de ramas verdes, se ve a una menor de edad llorando porque se corta al árbol, “son malos”, se escucha que dice la niña. Otra voz asegura que interpondrán denuncias en instancias federales.
Según los manifestantes, las podas deben hacerse de tal manera que no se dañe al árbol, cortando las ramas secas o en riesgo de caer, o cuando el árbol esté infestado de parásitos.
La Ley señala que las podas deben hacerse a finales de otoño y durante todo el invierno, y se debe poner una sustancia en las extremidades cortadas para evitar que aniden parásitos que puedan dañar al árbol mientras está “dormido”.
HAN ANTECEDENTES
En mayo de este año (en primavera), la poda de árboles en la escuela Centenario fue motivo de polémica, luego que la Dirección Municipal de Protección al Ambiente ordenara la poda de un árbol, donde murieron más de 50 crías de garza (ave migratoria que anida en los pinos de la escuela) ante la indolencia de los podadores y las autoridades.
La poda y la muerte de las aves fue justificada por Saldaña Díaz, quien sostuvo que las garzas “están todo el año”, y “son una plaga”.
A partir de entonces, el Colectivo Conciencia Ambiental y padres de familia organizaron limpiezas para evitar que las garzas ensuciaran la escuela.
Irrita poda de árboles
Increpan vecinos y ambientalistas a los trabajadores.