Durante seis años, el oficial Martínez estuvo luchando para conseguir su sueño de ser policía hasta que lo logró y ahora quiere seguir superándose.
Ese tiempo, estuvo trabajando como vigilante comunitario en varias colonias donde los propios habitantes pagan su sueldo.
Hace dos años fue llamado para formar parte de la Policía Municipal de manera oficial y obtuvo su base.
“Anteriormente mi mamá trabajaba en la cocina de la Policía Municipal, yo tenía ocho años y a veces venía con mi mamá a la comandancia. Me gustaba ver cómo trabajaban los policías y desde ahí me nació el gusto de formar parte de la corporación.
“Seis años estuve trabajando como policía comunitario, subsistía con el sueldo que me pagaban los vecinos de las colonias que vigilaba.
“Todo ese tiempo veía a los oficiales cómo hacían los operativos, cómo hacían las detenciones y andaban en las patrullas, por eso yo también quería ser como ellos, hasta que un día hace dos años me aceptaron la documentación y me hablaron para formar parte de la Policía Municipal”, comentó.
Pero durante los años que trabajó como policía comunitario sentía que se quedaba estancado, ya que durante mucho tiempo se quedó vigilando una sola colonia a petición de los vecinos que no querían que los reasignaran a otro lugar, pues les gustaba como desempeñaba su trabajo.
“Sí me gustaba estar ahí, pero yo quería conseguir una oportunidad formal en la Corporación Preventiva, quería andar con el resto de policías patrullando las calles, en operativos y sobre todo ayudando a la ciudadanía.
“Ahora que lo logré me siento satisfecho por tener este trabajo y poder mantener a mi familia, pues es algo fijo, no como antes que me cambiaban de colonia y variaba el suelo cuando era vigilante comunitario. Ya cumplí una meta, pero ahora quiero seguir superándome conseguir un grado, conocer otras áreas de la propia Policía”, relató.
Los reportes que le causan más impacto son los accidentes viales porque se queda con la incertidumbre de saber el estado de salud de los afectados, no sabe si lograron sobrevivir o si fallecieron.
“Los problemas sociales, los pleitos familiares me motivan para ir rápidamente ha ayudar a las personas y una vez que cumples con tu trabajo es satisfactorio, saber que lograste poner a salvo a una persona, pues ahora el índice de la violencia a aumentado, ya no son los mismos problemas que antes, ahora cualquier persona está armada.
“Cuando vas a reportes peligrosos sólo piensas en volver a ver a tu familia, o cuando vas a toda velocidad en la patrulla para atender un llamado de emergencia sabes que estás arriesgando tu vida, pero para eso estamos como policías, para brindar ayuda al resto de las personas”, agregó el oficial Martínez.
Con ganas de superarse
Empezó como vigilante comunitario, y tras 6 años ya es policía municipal.