La temporada de lluvias en la ciudad ha permitido que las presas que abastecen de agua a la ciudad están al 100 por ciento de su capacidad pero su almacenamiento cada año es menor.
De acuerdo con cifras de Comisión Nacional de Agua (Conagua), las presas La Esperanza y La Soledad, cada año pierden miles de metros cúbicos de agua debido al azolve que reciben.
“Estamos perdiendo sobre 2.7 y 3 mil metros cúbicos por año. Recordemos que las presas tanto La Soledad como La Esperanza son presas muy viejas y los niveles de azolve son altísimos”, dijo Humberto Navarro de Alba, delegado de Conagua.
La presa de La Soledad almacena actualmente 4.2 millones de metros cúbicos de agua y La Esperanza 3 millones, con lo que se dispone de poco más de 7 millones de metros cúbicos para abastecer a la población de la Capital.
“El nivel muerto pone en una situación muy compleja de disponibilidad del recurso a la ciudad capital”, afirmó Navarro de Alba.
Explicó que el azolve es un proceso natural que se genera cuando las corrientes situadas en zonas altas de las que se abastecen estos cuerpos de agua, a su paso arrastran basura, sedimentos y demás materiales.
El funcionario advirtió que si el nivel de ingreso de azolve se mantiene al ritmo actual, muy pronto los vasos de captación podrían dejar de ser útiles.
“Por eso la importancia de la nueva presa para recuperar esos niveles muertos, si hay agua pero la cantidad que se almacena poco a poco va disminuyendo”, aseguró.
Presas de la capital captan menos agua
Cada año baja el almacenamiento debido al azolve.