Poca difusión en Presa de la Olla

Aunque los visitantes poco a poco han regresado al lugar, comerciantes y locatarios de la Presa de la Olla consideran que requieren de más apoyo y difusión por parte de las autoridades y así mejorar la actividad comercial en la zona.
A decir de ellos, pese a que este sitio es uno de los más tradicionales y visitados de la Capital, no puede compararse con otros como el Museo de las Momias, el Pípila o la zona Centro, porque carecen de programas de difusión.
Sin embargo, los visitantes poco a poco han vuelto a la zona, lo que ha permitido mejorar la actividad comercial, en especial la venta de alimentos y diversas artesanías.
“No estamos como en otros lugares con mucha gente porque no nos dan la difusión que reciben las Momias o el Pípila pero la gente ya está viniendo de nuevo”, dijo José Luis, vendedor de artesanías.
En la zona se ofrecen diversos platillos preparados como gorditas, tlacoyos, tacos, guacamayas, mariscos y otros productos culinarios, que son los que más llaman la atención de la gente y dejan buenos dividendos a los comerciantes.
Les preocupa inseguridad
Algo que tiene preocupados a los locatarios es la inseguridad que se padece en varias zonas de la ciudad, sobre todo porque por las noches cuando sus locales están solos, son visitados por ladrones que ya han perjudicado a varios de ellos.
“Ahorita ya mejoró mucho la cosa pero lo malo es en las noches, pues al quedarse los puestos y locales solos a muchos compañeros los han perjudicado”, dijo una joven vendedora de gorditas.
Un aspecto que evidencia que la gente ya no acude en igual cantidad a la Presa de la Olla y el Parque Hidalgo es el número de familias que se pueden ver, por cierto hoy escasas, cuando en otras fechas el jardín de llenaba por completo de visitantes.
Esta zona, una de las preferidas por los habitantes de la ciudad y turistas para llevar a cabo actividades de tipo recreativo, espera por tiempos mejores para ser visitadas por una mayor cantidad de personas.
“Nos hace falta que nos apoyen las autoridades, no tenemos difusión como lo hacen en otras partes y eso ha hecho que la gente ya no venga igual que antes”, aseguró Silvia, la comerciante.