Actualmente sede del Festival Internacional Cervantino y durante todo el año escenario de espectáculos de danza, teatro, música y por supuesto casa del Cine Club de la Universidad de Guanajuato, eso ha sido a lo largo de más de 60 años del Teatro Principal, aunque su historia se remonta al siglo XVIII.

En 1788 fue construido un edificio de estilo neoclásico en la calle Cantarranas para ser utilizado como corral de comedias. Hay que recordar que durante ese tiempo se dio el auge minero en Guanajuato y este espacio se abrió para traer un poco de diversión a la ciudadanía de aquella época.

Se menciona en varios textos que entre finales del siglo XVIII y principios del siglo XIX ya tenía renombre, pues era considerado como uno de los recintos más importantes del país. Dado que era el espacio de mayor entretenimiento para los guanajuatenses fue remodelado en dos ocasiones, en 1826 y 1831.

Después de la Revolución Mexicana fungió como cine, pero lamentablemente en 1921 el Teatro Principal sufrió un terrible incendio y estuvo clausurado hasta la década de los cincuenta, hasta que se propuso su reconstrucción.

El teatro fue reinaugurado el 16 de septiembre de 1955 y actualmente es administrado por la Universidad de Guanajuato.

Para los capitalinos ya es toda una tradición asistir al concierto de la Orquesta Sinfónica de la máxima casa de estudios para escuchar sus variados programas que tienen durante todo el año.

Cabe recordar que en enero de 2015 se develó una placa conmemorativa por su 60 aniversario donde la Sinfónica presentó un programa especial destacándose la interpretación de la Obertura de ‘Las bodas de Fígaro’.

Cabe señalar que a un costado se encuentra la subida principal que desemboca en la Plaza de Mexiamora, lugar donde también se han presentado los Entremeses Cervantinos.

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