El flúor y el arsénico son elementos muy tóxicos encontrados en el agua, una larga exposición puede provocar mutaciones, cáncer, daño al hígado, daño al sistema gastrointestinal, problemas en la piel e incluso abortos espontáneos, es por esto que en la Universidad de Guanajuato (UG) se trabaja para disminuir estos contaminantes.
El límite de flúor y arsénico para el consumo humano es de 1.5 miligramos por litro, sin embargo, en comunidades como Xichú, Ocampo y otras zonas aledañas han encontrado en los pozos hasta 20 partes por millón, esto lo dio a conocer la Coordinadora de la Licenciatura de Química a cargo del Laboratorio Síntesis de Materiales Absorbentes Aplicados a Remediación Ambiental de la UG, Araceli Jacobo Azuara.
Jacobo Azuara aseguró que en cantidades altas el arsénico provoca mutaciones, cáncer, daño al hígado, daño al sistema gastrointestinal, y puede provocar problemas en la piel, e incluso abortos espontáneos; mientras que el flúor provoca manchas en los dientes, disminución del coeficiente intelectual en los niños, así como esclerosis múltiple a temprana edad, aumento de osteoporosis y daños en el sistema nervioso central.
Limpian aguas de flúor y arsénico
Logran disminuir en 90 % los contaminantes.