El oficial Alan forma parte de la Dirección de Seguridad Pública, como elemento activo desde hace un año, cuenta que decidió entrar porque trae en la sangre el deseo de ayudar a las personas pero sobre todo de protegerlas de cualquier tipo de peligro.
Cuando su familia se enteró que entraría a trabajar a este arriesgado oficio, lo apoyó como al igual que sus hermanos y su papá que también son oficiales.
“A pesar de que tengo poco tiempo como elemento, me siento muy orgulloso de serlo, porque me gusta todo lo que tienen que ver con la seguridad, pero sobre todo, ayudar a las personas. Mi familia me apoya sin ninguna adversidad, desde niño siempre quise ser esto y ahora lo soy, creo que ya lo llevo en la sangre de familia”, explicó Alan.
Considera que el ser policía no le ha cambiado su forma de ser como persona, porque piensa que el ser uno mismo es muy importante, y nunca se le puede olvidar de donde vienen.
Ser Policía lo lleva en la sangre
Con el apoyo de su familia se supera día a día; lo que más disfruta de su trabajo es ayudar a los ciudadanos que lo requieran