Las cenizas de Mario “Volador” Díaz estuvieron en uno de sus últimos escenarios donde regó su calidad como futbolista y persona. La urna fue mudo testigo del homenaje póstumo que se le brindó en el campo de la Liga de Veteranos.
Un partido donde acudieron varios de sus amigos y compañeros con los que compartió cancha, además de sus familiares, organizado por la agrupación denominada Eternos del Fútbol.
El recuerdo
Mientras la urna con las cenizas del “Vola” Díaz Rodríguez permanecía en el cetro del campo, se desarrollaba el partido, hasta que llegó el momento más emotivo; se realizó el cambio, salieron las cenizas del campo y en su lugar entró el hijo, del homenajeado póstumamente.
Como recuerdo se jugó el partido con algunos jugadores del Atenas, último equipo del “Volador” Díaz y la agrupación Eternos del fútbol.