El aumento del gas en los primeros días del año impactará negativamente en los bolsillos de los capitalinos, incremento que se sumará a otros que ya se han registrado en la llamada “cuesta de enero”.
En opinión de algunos capitalinos, la situación será peor conforme avancen los días, ya que la inflación que hay en el país, ha comenzado a surtir efectos en la canasta básica, cuyos precios se han ido incrementando desde la mañana del 1 de enero.
Así ocurrió con el gas butano, elemento necesario en cualquier hogar mexicano, que en las primeras horas del 2018 incrementó su costo a casi los 600 pesos, cifra que representa un aumento del 60% en costo, sólo durante el sexenio de Enrique Peña Nieto.
Y es que tras la escalada de precios en las gasolinas, los primeros días de este 2018 están resultando complicados para las familias guanajuatenses y mexicanas en general, por un incremento en los productos llamados “de primera necesidad”, como la tortilla, el azúcar y ahora el huevo.
En el caso del gas licuado de petróleo (LP) en cilindro, el combustible que según las estadísticas utilizan siete de cada 10 hogares mexicanos para calentar agua y cocer alimentos, también subió 7.1 por ciento, al pasar de 18.66 pesos por kilo, precio promedio a mediados de diciembre, hasta casi los 20 pesos a partir de enero.
Al respecto, algunos entrevistados aseguran que el verdadero impacto se podrá sentir avanzado el año, luego del primer semestre, cuando se vienen gastos importantes como el inicio del nuevo año escolar, cuyos productos siempre van a la vanguardia en los precios.