Pese a los intentos que se han hecho, el problema del grafiti en la ciudad aumenta día con día, y actualmente es posible identificar esta expresión urbana en diversos edificios y callejones históricos de la ciudad.
Como se pudo confirmar durante un recorrido hecho por am Express, en el primer cuadro de la ciudad existen diversas manifestaciones con aspiraciones artísticas, aunque en su mayoría, estas no pasan de meras firmas con las que se identican entre ellos los jóvenes.
Sin embargo, estos “garabatos” que a la mayoría sorprenden, representan un problema de imagen urbana para la ciudad, cuyas autoridades luchan por mantenerla en los primeros lugares de preferencia de los visitantes que lleguan al país, y los que provienen del interior.
El Jardín Reforma, el Centenario Mercado Hidalgo, son algunos de los edificios en los que más tardan en borrar las marcas que causa la juventud, que en los que éstos regresan a dejar su grabado.
Como lo muestran las imágenes, el problema se agrava en los callejones de la Zona Centro, en los que resulta más fácil para los “malandros” dejar sus marcas de pintura, ya que en algunos de estos es escasa o nula la vigilancia ofical durante las noches.
Al respecto, los propietarios de una casa afectada en el callejon de Calixto, aseguraron haber dejado de intentar combatir el problema ante lo inútil que resulta comunicarse con los responsables. “antes seguido tenía que estar pintando… ahora mejor dejo así como está y pierden el interés con el tiempo”.
En otros lugares, como el caso de las paredes del Mercado, pese a que durante la segunda mitad el 2017 una cuadrilla de trabajadores hasbía retirado las pintas que se habían hecho gracias al uso de una máquina especial que usa una mezcla de agua, vidrio molido y aire a presión para retirar la pintura sin afectar la cantera, las marcas fueron impuestas nuevamente ante la falta de vigilancia.
Previo al arranque del Festival Internacional Cervantino, el Ayuntamiento emprendió una campaña, para “preservar el patrimonio y belleza de la Capital”, sin embargo, los trabajos de remoción y limpieza de estas expresiones han quedado en el olvido luego de la culminación del Festival.