Ayer la jueza del Sistema Penal Acusatorio del Poder Judicial del estado Ma. del Rocío Arias Arévalo, sentenció a 1 año y 8 meses de prisión al ex regidor del PRD en el Ayuntamiento de Guanajuato capital Julio César García Sánchez, por violencia familiar en contra de su ex pareja, pena que será conmutada con trabajos en favor de la comunidad.
Este proceso judicial inició en contra de regidor con licencia, por hechos ocurridos el 16 de enero de 2016, cuando García Sánchez golpeó y amenazó a su ex pareja en esa ocasión.
Mediante un comunicado Las Libres indicaron que el ex regidor, quien a raíz de la denuncia y el proceso que se le siguió por esta agresión fue suspendido de sus funciones por el Congreso.
Por ello, en la audiencia celebrada este miércoles, la jueza le preguntó si entendía en qué consiste esta salida del sistema acusatorio, si renunció a someterse a un juicio ordinario y si aceptaba su culpabilidad en el delito de violencia familiar. A las 3 preguntas García Sánchez respondió afirmativamente.
La jueza Arias Arévalo resolvió que Julio César García ejerció violencia de género en contra de su ex pareja empoderado por su cargo de regidor del Ayuntamiento, lo que incidió en la agresión y amenazas en contra de la mujer.
Como parte de los beneficios que otorga el procedimiento abreviado, la juez resolvió conmutar la pena corporal por trabajo en favor de la comunidad, mismo que Julio César García deberá prestar en una institución pública durante un equivalente de 3 horas por cada día de la sentencia, además de pagar la reparación del daño a la ofendida.
El sentenciado también es suspendido en sus derechos políticos por el lapso de la condena, y deberá someterse a una evaluación psicológica bajo el criterio de un juez de ejecución, que de acuerdo a lo que resulte dictará la terapia necesaria que deberá tomar.
En los resolutivos de la sentencia, la jueza Arias Arévalo impuso una medida de restricción al político perredista para prohibirle cualquier acercamiento a la víctima, su domicilio, el de su familia y los lugares donde ella se encuentre, durante un plazo de 3 años y 3 meses.
Con esta medida, la jueza busca proteger a la ofendida de sufrir otro acto de violencia de género por parte de García Sánchez; ello debido también a que en la audiencia anterior se expuso ante la juez que el regidor suspendido se presentó en casa de la ofendida en estado de ebriedad, por lo que se requirió la intervención de la Policía Municipal de la capital. En esa audiencia, García fue apercibido por la jueza por este motivo y se advirtió sobre nuevas medidas de restricción. Las Libres acompañaron a la ofendida en todo el proceso, mismo que duró 2 años y 4 meses hasta la audiencia de hoy, en la cual la sentencia quedó firme debido a que ambas partes la aceptaron en sus términos y no apelarán.