León, Guanajuato.- En el barrio El Coecillo los vecinos y comerciantes ya no respetan la cuarentena. Para ellos no existe el COVID-19, ni sana distancia.
Locales de venta de artículos no esenciales que estuvieron cerrados durante dos semanas, ya abrieron.
Mientras el jardín de San Juan sigue acordonado y vigilado para evitar que la instalación de puestos callejeros, el de San Francisco, que está a una cuadra, está abierto y con decenas de vendedores ambulantes.
En el mercado hay medidas sanitarias, pero afuera, “en el jardín es un desorden y no hay protocolos de protección”, dijo Alfonso Soto.
Con altavoz, desde su farmacia, Juan Aguilera Azpeitia, colaborador de AM, llama a tomar conciencia, pero no hacen caso.
Es como la voz que clama en el desierto. El templo de San Francisco está cerrado, pero la gente ya no está respetando la cuarentena y eso es peligroso”, dijo otro comerciante, Luis Márquez.
AM