Guanajuato.- Afuera del Mercado Aldama, la señora Juana Bustos recuerda que con 500 pesos compraba su mandado el año pasado. Ahora lleva 800 y a duras penas le alcanza.
“Está bien caro, pero qué más hace uno, tiene uno que comer, ahí tiene uno que ver qué compra más o menos, pero hay que seguir haciendo el mandado”, dice mientras la acompaña su nieto, que la ayuda a cargar las bolsas.
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Guanajuato fue durante 2021 el quinto estado del País con mayores alzas de precios en los productos básicos. Y la tendencia se mantiene este año.}
De acuerdo con el reporte de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), que preside Cuauhtémoc Rivera Rodríguez, 10 alimentos de la canasta básica tuvieron incrementos durante 2021.
Los datos de ANPEC consignan que el limón registró un alza del 180%; la cebolla y la papa duplicaron su precio; la naranja aumentó 64%.
“El 2021 cerró con una alta inflación que provocó que este año abriera con la mayor escalada inflacionaria de la última década”, comentó Rivera Rodríguez.
El Índice Nacional de Precios al Consumidor aumentó durante enero 7.07%, reportó el INEGI: fue el onceavo mes consecutivo en que subió la inflación, aunque el porcentaje se redujo en comparación a diciembre del 2021, cuando fue de 7.36%.
En Guanajuato el aumento de enero fue de 7.39%, de nuevo por encima del promedio nacional.
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Lastima inflación a guanajuatenses
Las familias lo resienten. Muchas de ellas en vez de comprar un kilo de tortillas se llevan la mitad, el huevo por pieza, arroz, frijol y azúcar por medios kilos, lo mismo quesos y embutidos.
Hay casos como los del tomate, aguacate, cebolla y papa que ahora la gente compra por pieza, los kilos salen muy caros.
El impacto es en cadena, porque perjudica también a un millón 200 mil pequeños comercios en México, que hacen menos compras y batallan más para vender sus productos.
“Nos afecta mucho porque es una cadena de afectaciones. Nosotros compramos menos, el cliente también y aparte por la temporada de frío hay mucho desperdicio de fruta que no madura es también merma”, contó Mariana Álvarez.
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Puso como ejemplo que la manzana pasó de costar 30 pesos a 45, el plátano de estar en 8 pesos subió hasta 25 y la papaya de 18 subió hasta 29 pesos.
“Si comprábamos 10 cajas ahora hay que comprar 5, sin duda que este incremento fue mayor que el del 2020 y el del año pasado, a nosotros nos ha provocado por lo menos un 40% de menos ventas”.
Concepción Delgado vende menudo y lamentó que cada vez que va al mandado a surtir encuentra los precios más altos.
“Está fatal& no se diga el limón, ya hasta mejor en vez de dos estoy pensando en darle uno a la gente, pero pues uno tiene que mantener los precios y el servicio”, contó mientras esperaba que pasaran por ella para que le ayudaran a cargar sus bolsas.
Mencionó que el kilo de limón lo compró en 70 pesos y que por la cebolla, que también es ingrediente principal en su menudería, tuvo que pagar 45 pesos.
“Al menos el cilantro lo encontré en buen precio”, dijo resignada.
Que el impacto es en cadena lo demuestra Antonio Pacheco, “cargador” en el mercado, para quien el principal síntoma de que los alimentos tienen aumento es que bajan sus propinas: de 500 pesos hay días en donde apenas si alcanza a sacar 50 o 100 pesos.
“Cuando hay aumentos, bajan las propinas, hasta las mismas personas le dicen a uno que no hay, porque se gastaron todo en el mandado, y uno que vive al día también lo resiente”.
La situación es complicada para todos.
Magdalena Rivera tiene que pagar 6 mil pesos mensuales de renta por un espacio en el Mercado Aldama, más los recibos de agua y luz y dijo que es difícil cubrir los gastos y además tener alguna ganancia en estas condiciones.
“A eso sume que cada vez es más el comercio informal que vende frutas y verduras, ellos a lo mucho pagan 20 pesos a Mercados, así que ya tenemos que surtir menos”, lamentó.
MCMH