Guanajuato.- La pandemia del COVID provocó en Guanajuato la pérdida de al menos 100 mil empleos formales, el crecimiento de 2.3% en la informalidad y aumentó la brecha laboral.
Los anteriores indicados, son solamente algunos de los temas en los que la entidad, como en general México y el mundo, ha resentido como consecuencia de la contingencia sanitaria.
Los sectores significativamente dañados y que más les ha costado recuperarse son la industria del cuero-calzado y turismo (comercio y servicios).
Según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), del INEGI, al tercer trimestre del 2021, el 56 % de personas ocupadas laboran en la informalidad, es decir, 1 millón 515 mil personas, de 2.6 millones de personas ocupadas en Guanajuato.
En el momento más complicado del confinamiento social la autoridad estatal habló de 50 mil empleos perdidos, sin embargo los datos de la ENOE reveló que al cierre del año pasado aún existían cerca de 110 mil personas desempleadas en Guanajuato. Es decir 56 de cada centenar de trabajadores ubicados en la informalidad.
En el más reciente reporte de #DataCoparmex, Guanajuato fue la tercera entidad con peores números. Sus datos son generados al analizar la proporción de personas que están desempleadas, subocupadas o desanimadas para buscar un trabajo.
Guanajuato fue el antepenúltimo lugar, con el 31% de su población adulta que está en cualquiera de estas tres condiciones..
Además, 4 de cada 10 personas que viven en Guanajuato no cuentan con los suficientes ingresos para adquirir la canasta básica alimentaria, es decir que en la entidad más de 2 millones 516 mil viven en pobreza laboral.
Este indicador se refiere a una familia que no alcanza para que cada uno de sus integrantes acceda a la canasta alimentaria básica, que oscila en los mil 877 pesos mensuales o 63.5 por persona.
MCMH