Guanajuato.- “Es un tema que rebasa en mucha parte nuestras capacidades estatales “, reconoció Héctor Salgado Banda, Secretario de Finanzas de Guanajuato, sobre el hecho de que las plataformas de renta de casas, como Airbnb, no hayan sido dadas de alta en el padrón de contribuyentes del estado para que paguen el Impuesto al Hospedaje.
Esto, a pesar de que hace varios años se reformó la ley para incluir estas plataformas como contribuyentes del citado impuesto.
El funcionario dijo que hay que ponerse de acuerdo con el SAT y la Federación en la normatividad.
El 16 de noviembre, Mauricio Trejo Pureco, presidente municipal de San Miguel de Allende, reveló que en todo el estado, pero especialmente en San Miguel de Allende, las casas que rentan vía Airbnb no están pagando el Impuesto al Hospedaje porque el Gobierno del estado no los ha metido a los padrones de contribuyentes, mientras que los hoteles sí lo pagan.
El Secretario de Finanzas dijo que este tema de las plataformas tecnológicas se está tratando en la Comisión Permanente de Funcionarios Fiscales. Comentó que tanto Guanajuato como la Ciudad de México han avanzado de manera importante.
“Es un tema que va a dar mucho de que hablar y que hay mucho que hacer para atender al 100% esta situación.
Estamos conscientes de lo que ha dicho el alcalde, pero no solo él. Se está trabajando de la mano con la Secretaría de Hacienda y el SAT”, comentó.
En San Miguel de Allende hay tres mil cuartos de hotel, mientras que hay seis mil cuartos que se rentan en casas mediante Airbnb. Si les cobrara el impuesto a todos, el Gobierno del estado podría recaudar por nueve mil cuartos, dijo entonces el alcalde Trejo.
Los hoteles pagan 100 millones de pesos de Impuesto al Hospedaje. Y los cuartos que se rentan vía plataforma son el doble de los hoteles. De tal manera que, calculó, si pagaran el impuesto, se recaudarían 200 millones de pesos más, para dar un total de 300 millones de pesos.
Y esto ayudaría a que no se tuvieran que pedir tres mil millones pesos de deuda por parte del Gobierno del Estado, sino menos. O tres mil 300 millones que alcanzarían para hacer más cosas.
DSS