León, Guanajuato.- El uso indiscriminado de redes sociales y provenir de una familia desestructurada predispone a niños, niñas y adolescentes a las autolesiones, que incluyen el “cutting” o cortar la superficie corporal para aliviar emociones que no pueden manejar.
Casi siempre son emociones negativas, como enojo, soledad, miedo o frustración.
El “cutting” es una práctica que provoca un dolor físico, que es más controlable, para distraer del dolor interior.
Cualquier persona puede autolesionarse. Y si bien no suelen ser un intento de suicidio, pueden aumentar ese riesgo por los problemas emocionales que la desencadenan.
Día Mundial de la Concienciación
Para visibilizar el fenómeno, cada 1 de marzo se conmemora el Día Mundial de la Concienciación sobre la Autolesión.
El psicólogo Jorge Martínez, de la Jurisdicción Sanitaria VII de León, pidió a padres y madres de familia:
No juzgar, no criticar, más bien acompañar y escuchar a sus hijos”.
Si tiene una buena estructura familiar, un buen maternaje y paternaje, el niño adquiere conciencia, que es la mejor vacuna para evitar lesiones, malas decisiones de las que se pueda arrepentir”.
En Guanajuato los más afectados son los estudiantes de secundaria, aunque ha habido casos desde los 9 o 10 años, hasta los 25, detalló el especialista.
Sin cifras oficiales
El fenómeno se detectó en el estado desde 2004, sin embargo, no hay cifras oficiales.
Existe como referencia una investigación de 2013 del Hospital Psiquiátrico Infantil Juan N. Navarro en Ciudad de México, que mostró que uno de cada cuatro jóvenes entre 12 y 17 años reportaron autolesionarse.
De 175 encuestados que aceptaron el problema, el 77.7 % dijo haber experimentado cortes, el 0.6 % quemaduras, el 3.4 % golpes, el 4.6 % pellizcos y el 5.7 % con ingesta de fármacos.
La problemática no es por género, es generacional, dijo Martínez Gaspar, por lo que ahora se trabaja de manera preventiva para evitar se normalice.
La encuesta estatal de Planet Youth 2022 muestra que el 81 % de los estudiantes dice que es fácil recibir cariño de sus padres o tutores, cinco puntos porcentuales menos respecto a 2020.
Dos casos que lograron superarlo
Mary tenía 13 años cuando comenzó a cortarse los brazos.
Lo descubrí en la secundaria, porque una amiga lo hacía. Duré así como dos años, antes de que mi mamá me descubriera”.
Ramiro también lo hizo por imitar a sus amigos. Al inicio eran cortes superficiales, luego fueron cada vez más profundos. Para ocultarlos, comenzó a usar muchas pulseras.
Sentir dolor me hacía sentir bien, que si podía superar ese dolor físico podía superar el problema emocional por el que estaba pasando”.
Cuando lo descubrieron cortándose dejó de hacerlo evidente y en cambio:
Hacía cosas muy arriesgadas donde sabía que me iba a lesionar”.
Como principiante en la patineta intentaba acrobacias que no estaban a su nivel, siempre terminaba lastimado.
Hoy ambos lo han superado: a Mary la impactó ver cómo su comportamiento afectaba a su hermanita y Ramiro cambió de amigos y con mayor edad, se dio cuenta de que eso no le hacía bien.
SEÑALES DE ALERTA
Jorge Martínez pidió a las familias estar atentas de sus chicos.
- Cambio repentino en la forma de vestir, la persona esconde su cuerpo, incluyendo en épocas de calor
- Presenta cicatrices, heridas o moretones
- Tiene dificultades para hablar de sus emociones.
DATO:
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RAA