Guanajuato, Guanajuato.- La aerolínea Viva Aerobus dejó inservible durante cuatro días la silla de ruedas de José Grimaldo Colmenero, director del Ingudis, pues la desarmó para un vuelo, cuando esa silla no debe desarmarse.
El 10 de abril, el funcionario publicó un hilo en su cuenta de Twitter para compartir lo que describió como: “mi mala experiencia en Viva Aerobus”.
El titular del Instituto Guanajuatense para Personas con Discapacidad explicó que es usuario parcial de silla de ruedas, que utiliza para traslados de larga distancia como en aeropuertos.
El domingo 9 de abril, que hizo un vuelo de Cancún a la Ciudad de México por Viva Aerobus, en el aeropuerto entregó su silla de ruedas al momento de abordar, dando la indicación de que la silla no se doble, le quitó el cojín, que es el asiento, única pieza desmontable y le dieron un ticket de registro. Tomó su vuelo.
Lo trataron de manera grosera
“Llegando a mi destino, (en el aeropuerto de Silao) me entregan la silla, lamentable y penosamente desarmada, ultrajada, en piezas… impotencia total al ver mi silla así. Mi silla, mi extensión en viajes. Irreconocible.
“Personal en tierra de Viva Aerobus, primera persona atenta, ella intentó ayudar. Segunda persona (me dijeron que era el supervisor) en este primer momento grosero, enojado y prepotente.
“Estaba impactado al ver mi silla así. Por la impresión y tristeza no le pregunté sus nombres”.
Narró que al pedir una solución al supervisor, le dijo reiteradamente y en tono de voz fuerte: “Nosotros no somos expertos en armar sillas de ruedas”.
Y enojado empezó a regañar a Grimaldo Colmenero por no saber si le faltaban piezas. Además le ordenó: “quítate de aquí, vámonos porque ya viene la tripulación del siguiente vuelo”.
Ya en los mostradores de Viva Aerobus, lo dejó con sus compañeros y un poco más tranquilo, el propio José Grimaldo contactó con la empresa donde compró la silla, les mandó video y fotos para que le indicaran si faltaban piezas.
Solo así tuvo confianza de llevarse la silla a su casa para armarla él mismo. Eran alrededor de las 9 de la noche.
Únicamente pudo levantar un reporte de daños en un formato de la aerolínea, con la indicación de esperar a que personal de la misma le llamara, sin fecha determinada, y comenzara una investigación al respecto.
El director del Ingudis comentó que en su caso, la silla es de apoyo, porque camina con prótesis.
“Pero me atrevo a compartirlo porque qué pasaría en caso de una persona hemipléjica, parapléjica, tetrapléjica. La silla es su principal extensión”.
En su mensaje de Twitter, le aclaró a Viva Aerobus que existen instancias que podrían brindar asesoría en el trato digno a viajeros en condición de discapacidad y el tratamiento de sus aditamentos para su desplazamiento.
Incluso enumeró ahí las direcciones electrónicas de varias organizaciones de este tipo.
“Viva Aerobus: Que mi mala experiencia después del vuelo Cancún-Bajío sirva para ir erradicando acciones indirectas de discriminación, por falta de conocimiento hacia las personas con discapacidad”.
El 14 de abril, informó que Luis Rendón, de Relaciones Públicas de Viva Aerobus, se puso en contacto con él.
Se comunicaron de Viva Aerobus con él hasta cuatro días después
Este sábado 15, en un video, José Grimaldo actualizó las gestiones del caso. Informó que el martes 11, 48 horas después del incidente, seguía sin recibir ninguna comunicación por parte de la aerolínea.
Hasta el jueves 13, le hablaron para decirle que estaban muy apenados, se comprometieron a llevar la silla a la Ciudad de México, donde él la compró, para su reparación y asumir el costo.
Pero no lo aceptó porque necesita su silla para su trabajo. Así que a través de una asesoría vía videoconferencia, logró armarla bien sin que sufriera ningún daño.
“También digo que por la trayectoria de su servidor y los años que llevo en esto, no me puedo quedar con los brazos cruzados y decir: no pasó nada”.
Por lo que anunció que enviará un escrito a la aerolínea narrando el maltrato que tuvo como persona con discapacidad y su silla de ruedas.
Le expresará la propuesta de plan de acción para que no vuelva a suceder un caso de esto, sensibilización de un trato asertivo a las personas con discapacidad.
Les presentará un programa para trato asertivo para las personas usuarias para las personas con discapacidad y generar con ellos protocolos incluyentes.
“Las cosas se están resolviendo pero no quiero que quede como una mala experiencia, sino que se resuelva para las personas en condición de discapacidad”, concluyó.
AM