Ciudad de México.- Desde la nueva composición del Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) y dentro de la Cámara de Diputados Morena ha extendido su manto sobre una organización cuestionada por las acusaciones de abuso sexual infantil que pesan contra el líder espiritual de La Luz del Mundo (LLDM).
Naasón Joaquín García, considerado por los fieles de su Iglesia como el “Último Apóstol de Jesucristo”, fue arrestado en Nueva York en junio de 2019 y condenado a 16 años y ocho meses de cárcel por las autoridades norteamericanas, el 8 de junio de 2022.
Ahora, con el apoyo del gobierno de la Cuarta Transformación, dos integrantes de Morena, quienes públicamente profesan su pertenencia a la asociación religiosa de Joaquín García –la llamada “mini bancada de La Luz del Mundo” en San Lázaro– obtuvieron el registro como agrupación política nacional de lo que denominan “Humanismo Mexicano”, organización satélite del partido en el poder.
Los vínculos de esta agrupación religiosa con la política han sido evidenciados desde su fundación. Nació con el priismo revolucionario, según los especialistas en teología; luego acordó con el PAN para otorgar votos a sus candidatos en algunos estados del norte del País y, ahora, además de contar con legisladores afines en MC y el PRD, son claramente respaldados por un sector de Morena que ha manifestado su simpatía por el canciller, Marcelo Ebrard, como aspirante presidencial.
Registro ante el INE
Legislador de Morena por Guanajuato, Emmanuel Reyes Carmona encabeza este nuevo grupo. “Es una agrupación que es progresista, y que además está fundada en los principios de la libertad y de la igualdad. Vela por el acceso de los mexicanos a los derechos humanos, retoma los principios, valores, del presidente Andrés Manuel López Obrador, para que los mexicanos sean más sensibles a las necesidades de la sociedad mexicana”.
La agrupación Humanismo Mexicano presentó al INE cerca de 26 mil firmas para obtener su registro formal. Aseguran que son un grupo plural y en favor del laicismo de Estado e impulsor del goce efectivo de derechos humanos de las minorías migrantes, afromexicanas, indígenas, personas con discapacidad y de la diversidad sexual.
Sin embargo, acepta que “95% de sus militantes son católicos”, es decir, se apegan a la moral cristiana.
A decir de la doctora en Ciencias Sociales Reneé De La Torre, ante el escándalo por los delitos cometidos por su líder, Naasón Joaquín García, los seguidores han optado por “cobijarse” en los partidos políticos. “Es una manera de buscar refugio en lo político”. Pero también explica un beneficio para Morena, que ya no contó con aquel apoyo que tenía en el Partido Encuentro Social –de evangelistas– y que ha de encontrar apoyo, más efectivo, con La Luz del Mundo.
Autora del libro “Los hijos de la luz. Discurso, identidad y poder en La Luz del Mundo”, De la Torre expone la sistemática manera en que la organización religiosa busca desmarcarse de la agrupación política. “Parte de su cultura siempre ha sido ser negacionistas en sus declaraciones públicas. El negacionismo es parte de una cultura política y pública de LLDM”.
Reyes Carmona, al respecto, se mantiene sin reconocer los nexos entre ambas entidades. Habla de alrededor de 26 mil ciudadanos reunidos en 17 sedes estatales, hasta enero, aunque ahora dice contar con más de 50 mil afiliados.
Su objetivo, reitera el legislador, es “fortalecer los trabajos de organización de Morena en el territorio” y su presencia en estados como Guanajuato, donde habrá elección a la gubernatura en 2024, y pretende, con esta nueva fuerza política, dar una opción a aquellos que no con comulgan con los principios de la Cuarta Transformación.
“La principal fuerza política de Humanismo Mexicano está en Guanajuato, pues yo soy de Guanajuato; entonces la realidad es que ahí es donde comenzamos a recabar el apoyo”, dice el presidente de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados.
Reyes reconoce que esta estructura viene a reafirmar la posición de Morena en estados donde no ha tenido arraigo. Asegura que, por ningún motivo, busca convertirse en un partido político independiente del partido oficial.
Pero el impulso de este conjunto político-evangélico no acaba ahí. En las fotografías de celebración de su registro ante el INE aparecieron los otros dos integrantes de la ‘mini bancada’ de esta congregación: el diputado Hamlet García, quien dijo no pertenecer a este movimiento, y el diputado con licencia Favio Castellanos Polanco, quien está por recuperar su lugar en el Congreso.
Maniobra contra diputado
Castellanos Polanco ingresó a la LXV Legislatura el 1 de septiembre, y el Pleno de San Lázaro le concedió licencia indeterminada en octubre de 2021 para poder ocupar el cargo de delegado de Morena en Jalisco. Entonces se propuso declarar la vacante en la bancada de Morena, por lo que el 18 de octubre rindió protesta el neolonés Mauricio Cantú.
Al término de su encomienda en la entidad jalisciense, Castellanos pidió a la Mesa Directiva de San Lázaro ser restituido como diputado federal suplente, pese a haber dejado vacía la curul como sustituto de Emmanuel Reyes y para dar paso a la toma de protesta de Cantú –según la lista plurinominal– y a su suplente.
La negativa de la Cámara motivó a Castellanos a interponer ante el Poder Judicial un juicio para la protección de su derechos político electorales.
El caso llegó a la Sala Superior del Tribunal Electoral, que, en un hecho sin precedentes, determinó en su sesión pública el miércoles 3 que se le reincorpore de inmediato, tras volver de su licencia indefinida, en el lugar como suplente de Reyes, quien era el titular.
El diputado Cantú –el afectado– consideró que se sienta un peligroso precedente: “Espero que estos tres magistrados que votaron el proyecto sepan las repercusiones que va a tener porque abre la puerta a que cualquier suplente pueda regresar, y queda de facto obsoleta la vacancia, fijada en la Constitución, para que no haya un vacío de representación”. Reconociendo la sentencia inatacable, afirma que la cumplirá.
Regresión
Con el movimiento de reincorporación de Castellanos y otros miembros autorreconocidos de La Luz del Mundo en la Cámara de Diputados, se da paso “a un retroceso”, denuncia el panista Jorge Triana. “Habla de la sed de poder que tiene esta agrupación, que ya vio cuál es el camino. Siempre, durante años, ha sido un tema prácticamente vetado en la política mexicana, el que se mezcle la religión. Y estamos viendo que vamos en sentido contrario”.
El propio Emanuel Reyes reitera su convicción ideológica. “Favio (Castellanos) y tu servidor sí somos miembros de La Luz del Mundo, pero no tenemos ningún impedimento legal para podernos agrupar, para podernos asociar… Tenemos un capital político importante”.
LALC