León, Guanajuato – Kondakova Rocketry Club es un equipo estudiantil del UPIIG- Instituto Politécnico Nacional campus Guanajuato que recientemente fue finalista en un concurso internacional de cohetes experimentales en Estados Unidos, con Belka, un cohete a base de fibras naturales.
La competencia se llama Spaceport America Cup 2023 y es el concurso de cohetería experimental más importante, participan más de 150 instituciones de todo el mundo.
El equipo mexicano, integrado en su mayoría por mujeres, quedó entre los cinco mejores y ganó diez insignias por innovación y espíritu deportivo.
Belka el primero en su tipo
Su cohete se formó de la mezcla de coco, yute, henequén y resina epóxica que según les dijeron los jurados, sería el primero en su tipo.
“La competencia está diseñada para poner a prueba a estudiantes de las mejores universidades del mundo ante las empresas más importantes del sector aeroespacial y reclutarlos posteriormente”, dijo Paulina Pantoja, una de las dos colíderes de KRC, estudiante de ingeniería aeronáutica.
El equipo lleva el nombre de Yelena Kondakova, la primera mujer en hacer un vuelo de larga duración en el espacio.
Y tiene el objetivo de crear un espacio para las mujeres en el sector aeroespacial, anteriormente dominado por hombres, para que ellas puedan expresarse libremente y contribuir a él.
El grupo está integrado por 27 universitarios, 19 mujeres y 8 hombres. La mayoría son de aeronáutica, pero también hay de ingeniería industrial e ingeniería en biotecnología.
Detalló que los materiales más comunes para construir estos cohetes son compuestos sintéticos -fibra de carbono o fibra de vidrio-, pero por cuestiones de presupuesto, el equipo guanajuatense comenzó a investigar alternativas. Así, el costo bajó en proporción de 10 a 1.
La alumna también comentó que tanto la fibra de carbono como la de vidrio requieren cumplir estándares de seguridad, en cambio, con fibras naturales es menos peligroso, puesto que estos cohetes llegan a alcanzar los 300 m sobre segundo.
“En general, los cohetes como los que hacemos se usan para poner experimentos a bajas órbitas o en la atmósfera: satélites de baja escala que cumplen misiones a poco alcance, como mapear un terreno, revisar qué partes son fértiles o revisar cómo va a estar el clima”.
Recibieron la asesoría de varias y varios profesores y en septiembre pasado, participaron en el Encuentro Mexicano de Ingeniería en Cohetería Experimental, donde ganaron el primer lugar en la categoría de presentación del proyecto por el tipo de material.
Eso las impulsó para participar en la Spaceport America Cup, competencia ubicada en pleno desierto de Nuevo México, donde su propio cohete sería el objeto de estudio, observar cómo reaccionaba ante el despegue, vuelo y posterior recuperación.
Con mucho esfuerzo tramitaron sus visas y costearon su viaje, primero a través de rifas y venta de playeras, posteriormente con patrocinio de empresas y del Gobierno del Estado.
Su cohete se llama Belka, en honor a una de los dos primeros seres vivos en completar un vuelo espacial exitoso regresando a salvo, y en reconocimiento a la mascota del equipo, una perrita adoptada.
Spaceport America Cup 2023 se desarrolló entre el 19 y el 24 de junio
Y las insignias ganadas fueron por razones tanto técnicas (innovación, construcción, diseño, excelencia técnica) cómo de carácter social (trabajo en equipo, cooperación, coordinación para realizar la tarea), incluyendo el rescate de un perrito en pleno desierto.
Al regresar, además de las felicitaciones, una de las estudiantes se encontró con que había reprobado una materia por su participación.
El equipo KRC seguirá con la investigación y buscará patentar el material.
PCCD