Con información de Catalina Reyes
Guanajuato, Guanajuato.- La fiesta llegó a las calles de Guanajuato capital con el desfile conmemorativo por los 213 años de la toma de la Alhóndiga de Granaditas. A las 9 de la mañana, el cronista de la ciudad, José Eduardo Vidaurri, hizo una remembranza histórica de esta batalla clave y primera victoria del Ejército Insurgente.
Contó cómo Juan José de los Reyes Martínez, mejor conocido en la memoria colectiva como “El Pípila”, cargó en su espalda una loza y con la antorcha de la libertad prendió fuego a la puerta. Así pudo entrar el cura Miguel Hidalgo y Costilla acompañado de los insurgentes que anhelaban una nación independiente.
Tras la ceremonia ahora sí empezó la fiesta. La banda de guerra de la Preparatoria Militarizada de León abrió el desfile cívico militar encabezado por el gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo y el alcalde de Guanajuato capital, Alejandro Navarro Saldaña, así como otras autoridades.
Desde temprano cientos de personas se dieron cita en las calles del Centro Histórico de la ciudad. Muchos sacaron sillas y bancos; otros disfrutaron de pie del desfile defendiéndose de los rayos del sol con sombrillas de colores que terminaron de adornar la fiesta de la ciudad.
Asociaciones civiles, grupos deportivos, escuelas, Ejército Mexicano, Guardia Nacional, Fuerzas de Seguridad Pública del Estado de Guanajuato (FSPE) y muchos más marcharon hasta el jardín de El Cantador.
No podían faltar los contingentes representantes de los 46 municipios de Guanajuato. Que este año además están de manteles largos por los 200 años de la fundación del Estado.
Así se vio el desfile:
Cada municipio trajo un cachito de su tierra, unos con trajes típicos, bailes, carros alegóricos, comida y música de banda que puso a bailar a las personas presentes.
Después llegó el contingente de los trabajadores de Servicios Públicos Municipales, uno de los más aplaudidos por la ciudadanía.
Luego sonaron las sirenas por toda la avenida Juárez de decenas de cuerpos de seguridad, rescate, Cruz Roja, Ejército Mexicano, Guardia Nacional y Bomberos.
A quienes la ciudadanía vitoreó, aplaudió y gritó “¡Viva!”, “¡Bravo!” y “¡Héroes!”.
Luce Diego sonriente en el desfile
En el desfile de este 28 de septiembre, el gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo lució muy sonriente a su paso por las calles de Guanajuato para celebrar el aniversario 213 de la Toma de la Alhóndiga de Granaditas.
“Buenos días, buenos días”, repetía a cada rato saludando a la gente que estaba en las banquetas.
“Gritale: Gobernador”, ordenó una señora a su hijo. “¡Gobernador!”, gritó el niño. “¡Hoooola!”, respondió. “¡Bravo, Diego!”, le gritaban sobre todo las señoras.
El desfile lo abrió, igual que el año pasado, uno de los orgullos y creación de Diego Sinhue: la banda de guerra de la Preparatoria Militarizada. Y enseguida apareció una novedad: un escudo rodante de la ciudad y el Estado de Guanajuato, con la Santa Fe viviente, es decir, una muchacha con los ojos vendados y su espada.
La gente de Guanajuato capital le aplaudía y sonreía a Rodríguez Vallejo, quién iba acompañado por su esposa Adriana Ramírez; por María Rosa Rodríguez, presidenta del Poder Judicial; por el diputado Miguel Ángel Salim, presidente del Congreso; y por Enrique Covarrubias, comandante de la XVI Zona Militar.
Atrás de ellos iban Alejandro Navarro, presidente municipal de Guanajuato, y su esposa Samantha Smith.
A su llegada al Palacio de los Poderes, en la Plaza de la Paz, la gente ahí reunida le hizo una ovación. “¡Diego, Diego, Diego!”, gritaron.
Abrió así el tradicional desfile de más de tres horas por todo el Centro de la ciudad, con contingentes de los 46 municipios del Estado, encabezados la mayoría por sus presidentes municipales. Desfile donde también los secretarios de todo el gabinete marchan al frente de los contingentes de su dependencia.
Se viste de charro
Para terminar el desfile, el Gobernador dio dos sorpresas: cambió el traje formal por el de charro y así bajó del palco principal en el Palacio de los Poderes para participar en el contingente de la Cabalgata por la Independencia, que cerró la parada.
Y enseguida, encabezó la renovación del fuego simbólico de la independencia en la Alhóndiga de Granaditas.
CA