León, Guanajuato.- La drogadicción es el origen de la mayoría de las violencias en las familias y contra las mujeres, e impacta en todos los estratos sociales, advirtió Renata Arévalo Ramírez, directora de la colectiva Alerta Violeta.
Este grupo de personas defensoras de los derechos de las mujeres dan acompañamiento desde lo legal y brindan contención emocional a mujeres víctimas de violencia.
“La droga es otro tema que nos tiene muy sorprendidas, porque impacta en niños, niñas, adolescentes, está pudriendo a las familias, nos han tocado situaciones de extrema violencia, muy vinculados a la venta de droga, no solo violencia familiar sino estructural”, advirtió la activista.
Dijo que justo el primer caso que acompañó Alerta Violeta fue la muerte de una joven en un anexo, que se sospecha fue un feminicidio.
También lamentó que el Gobierno estatal no reconozca las adicciones como un problema de salud cuando es ya una epidemia, ni asigne suficientes recursos para su tratamiento, no solo para la prevención.
“No se está viendo el problema de la drogadicción como el problema que es, se sigue revictimizando -a los pacientes-. El gobierno tiene la obligación de aportar los recursos, de tener sus propios centros de rehabilitación, con ciertos protocolos formales de atención, que no existen”.
Renata Arévalo denunció que muchos de estos anexos son vistos como un negocio o de plano, sirven de pantalla, como prostíbulos o las pacientes son víctimas de abuso sexual.
“Es un área que se está descuidando porque no se está viendo como un problema social que debe atenderse desde la raíz. (Las adicciones) desintegran a las familias, muchas mujeres deben dejar sus trabajos porque deben estar llevando comidas, cobijas, hay de todo, pero no hay protocolo. Es muy complejo”.
Eso imposibilita también que se pueda recomendar algún centro de rehabilitación, porque ¿cómo se garantiza que ese lugar ayudará a las familias?, cuestionó.
El proceso de separación se complica para las mujeres cuando además de parejas adictas estas también se dedican a delitos relacionados con esa actividad.
Cumplen 38 años en León
La presidenta municipal, Alejandra Gutiérrez Campos, aseguró que la Dirección de Desarrollo Urbano continúa con las revisiones a los usos de suelos de los centros de rehabilitación (anexos).
Detalló que por parte del municipio se cuenta con diversos programas para atender a los centros de rehabilitación, entre ellos el uso de suelo en Desarrollo Urbano, pues las autorizaciones finales las otorga la Secretaría de Salud del estado.
“Ahorita hay 88 centros, de los cuales 38 cumplen con todo, 32 en procesos, cuatro que ya se acercaron y cuatro que no han hecho nada”, dijo.
Afirmó que en este aspecto las diferentes dependencias trabajan de manera coordinada para que aquellas personas que sean consumidores se encuentren en el mejor lugar, también se les ofrecen becas para apoyarlos en su rehabilitación.
“Aquellos que ya iniciaron su trámite y se encuentra todo en regla se les apoya para que se puedan regularizar. Si están patas para arriba se les tendrá que clausurar, pero se trabaja de manera conjunta”, indicó.
Planet Youth es preventivo: Diego
El gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo dijo que planes de gobierno como Planet Youth se conciben para que sean transexenales, pues escapan de la esfera política y su base es ciudadana.
Reconoció que en el caso de Planet Youth, que busca prevenir las adicciones en niños y adolescentes, la pandemia le significó un retraso en las metas. Sin embargo, “en el quinto año de su aplicación (2024) tenemos que tener un resultado de una disminución del 30 % de adicciones en Guanajuato en esas edades. Ojo, es un programa preventivo para menores de 16 años, no para todo el universo de quienes ya son adictos”.
Planet Youth es una metodología de origen islandés para determinar cuáles son los factores de riesgo que existen en la comunidad, que orillan a los adolescentes menores de 16 años al consumo de sustancias, principalmente alcohol, tabaco y marihuana, esto mediante aplicación de encuestas y trabajo comunitario.
Este lunes, AM publicó un reportaje que recoge testimonios que advierten que mientras este año se destinaron 100 millones de pesos para la prevención de adicciones a través de Planet Youth, no hay apoyo oficial para los centros de rehabilitación privados, conocidos como anexos, los cuales subsisten por las cuotas de las familias.
En noviembre de 2019, el Gobierno de Guanajuato y el Centro Islandés de Investigaciones y Análisis Sociales firmaron el “Acuerdo para la Prevención de Adicciones”, para trabajar en este proyecto, que inició como piloto en los municipios de León, Silao, Guanajuato, Irapuato y Celaya.
Sin embargo, la irrupción de la pandemia provocó un desfase en la aplicación de las encuestas a los estudiantes, explicó el mandatario estatal.
“Estábamos en suspensión de clases y era mucho más complicado buscarlos casa por casa y que un niño de 12 o 13 años te contestara frente a sus padres si había probado alguna cerveza o algo”.
Recalcó, no obstante, el carácter preventivo de Planet Youth, no para quien ya tiene una adicción y necesita rehabilitación.
“Planes que se están entregando, como Mentefactura, Planet Youth, ¿quién puede estar en contra de combatir las adicciones con un plan bien diseñado por una institución como la Universidad de Reikiavik (Islandia)? ¿Quién va a estar en contra de una visión de modernización? Bueno, sí hay quién, ¿verdad?, pero eso es otra historia”, ironizó.
Festejos de Alerta Violeta
La Colectiva Alerta Violeta celebra este mes el segundo aniversario de su fundación, cuyo propósito inicial tuvo que cambiar por las circunstancias: pretendía y aún pretende apoyar a las mujeres para que logren su autonomía económica, pero eso es imposible mientras no se liberen de los ciclos de violencia.
Sin embargo, “cada día más nos convencemos que los servicios gratuitos que ofrece el gobierno -estatal- están lejos de tener perspectiva de género.
“La mayoría de nuestras usuarias en el tema legal vienen de haber ido a los abogados de oficio, vienen revictimizadas, muy decepcionadas, de poder buscar justicia porque no hay esta preparación de cómo cómo acompañar a una mujer víctima de violencia”.
Es volverlas a convencer, dijo, que tienen derecho a buscar justicia.
Renata Arévalo aseguró que en el último año, la colectiva atendió a más de 700 mujeres, así como a un grupo de 30 hijos e hijas de sus usuarias que están en proceso psicológico o legal.
Como parte de los festejos, se proyectó en sus oficinas hace unos días el documental “Ahora que estamos juntas”, dirigido por Patricia Balderas Castro, basado en el trabajo de taller de María José Millán sobre el acoso callejero en la Ciudad de México, Estado de México y otras zonas del País.
CA