En Guanajuato se contabilizan 3.97 millones de mascotas.

Guanajuato.- Hacer conciencia entre los dueños de animales sobre su cuidado, que los municipios acaten los reglamentos de control animal y hacer campañas permanentes de esterilización, fueron las propuestas de integrantes de organizaciones protectoras de animales para combatir la proliferación de perros sin hogar.

Así lo expresaron en la reunión que tuvieron con los diputados de la Comisión de Medio Ambiente del Congreso del Estado en la cual se analizaron dos iniciativas presentadas, por separado, del PAN y de la diputada Martha Ortega Roque, del PVEM.

El diputado César Larrondo Díaz, quien presentó la iniciativa a nombre del PAN, explicó que esta consiste en establecer en ley la creación de clínicas veterinarias médicas, pues el 24 de enero de 2024 se publicó en el Diario Oficial de la Federación el decreto de modificación de la Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente.

En este obliga a las entidades federativas a garantizar la esterilización gratuita de animales, y establecer clínicas veterinarias públicas para dar tratamiento médico veterinario. 

En un plazo de 180 días naturales, es decir, seis meses, los estados deberán hacer las adecuaciones necesarias. Todo está sujeto a la disposición presupuestaria de los municipios y de manera paulatina.

¿Qué dice la iniciativa sobre las clínicas veterinarias públicas en Guanajuato? 

  • Contar con hospitalización.
  • El personal de la clínica deberá estar a cargo de un médico veterinario responsable, deberá estar titulado y estar capacitados para la atención, además de contar con la infraestructura correspondiente y el personal capacitado para dar un trato digno y responsable. 
  • Deberán contar con separación física para atención de los animales, recepción y mostrador, ventilación adecuada, con área de separación de residuos. 
  • El diputado César Larrondo informó que se tiene contemplado beneficiar a 3.97 millones de mascotas en el estado, de los cuales 2.38 millones son perros, 614 mil gatos y 983 mil mascotas pequeñas. Esta es la población de mascotas en Guanajuato.
  • La diputada Martha Ortega informó que Guanajuato ocupa el sexto lugar a nivel nacional en número de mascotas.
  • Hay un promedio de 64 mascotas por cada mil habitantes, es decir, un promedio de 3.2 animales por casa.
  • De aprobarse la iniciativa, obligará a los municipios a realizar ajustes presupuestales y reglamentarios.

Estas son las peticiones de animalistas

Directores de Centros de Control Animal de varios municipios de Guanajuato. Foto: Catalina Reyes.

Cuando hablaron las organizaciones animalistas, Argelia Ramírez Villafaña pidió que no a todos los animales que van a dejar a los Centros de Control Animal se les sacrifique, “no tratarlos como plaga solo porque los abandonan”

Rosa María Ramírez, del Refugio Amigo Alfa Moroleón, propuso que cada municipio haga un estudio y un censo de los animales ferales. Destacó que toda la carga presupuestal no debe recaer en los municipios. 

Por otro lado, enfatizó que todas las clínicas veterinarias deben contar con personal que sepa los conceptos adecuados. Propuso que el municipio tenga un censo de los animales de compañía que lleguen a los centros de control animal. 

Están de acuerdo con que la vacunación y la esterilización sean gratuitas, pero los demás servicios no, porque es contribuir a la irresponsabilidad de los dueños, “si de por sí es difícil que muchas personas tengan conciencia. Porque el problema no son tantos los animalitos, mientras la gente no se eduque, el trabajo nunca va a acabar”. 

Los reglamentos “son muy bonitos pero que se apliquen”, dijo. Señaló también que en la Dirección de Ecología hay gente que dice que no sabe del trato con los animales. 

Antonia López Palacios, integrante del Colectivo Guindis de Guanajuato capital, se quejó de que cada vez que los invitan, sus propuestas quedan archivadas y después de muchos meses les avisan de que no fue incluida.

Aquí vemos que un centro de control animal solo cambió su nombre a Hospital Veterinario, de la noche a la mañana, sin equipamiento. A nosotros nos parece una burla, que un día nada más amaneció pintado de otro color con bombo y platillo”. 

Observó que se ha disparado el abandono de razas grandes de perros desde la pandemia.

“Muchas veces hacemos reportes y nos dicen que las unidades están en uso. Que el incinerador no sirve”. Y en cambio, a las organizaciones sí les llaman del Municipio para que vayan a rescatar a perros y gatos. 

“Otra situación que observamos es que aquí en el Municipio falta cultura de la denuncia, vemos que el Ministerio Público no está capacitado para recibir una denuncia”, dijo.

En Guanajuato el hospital es una simulación

Elizabet Chacón Hernández, de la Agrupación de Rescatistas Independientes, destacó que para ella es más importante crear los centros de control animal, antes que las clínicas veterinarias, “porque algo tan básico como darle una muerte digna, no lo tienen”. 

Mencionó que esa organización elaboró un reglamento tipo y lo han presentado a varios municipios, pero no lo han aceptado. 

Señaló que Abasolo es uno de los municipios “más sanguinarios” contra los animales.

Imagen de lo que será el Hospital Veterinario de León. Foto: Especia.

Nayeli Vázquez, de la Agrupación de Rescatistas Independientes, lamentó que en Guanajuato no se destina presupuesto para esta materia, por ejemplo en Guanajuato capital se destinó el año pasado 200 mil pesos, cuando se entregan 300 perros al mes al Centro de Control Animal, por lo que no los pueden atender adecuadamente.

“Solo el nombre tiene, porque aquí en Guanajuato solo el Hospital Veterinario está pintado. (…) Aquí en Guanajuato sí tenemos un Centro de Control Animal pero no da el ancho”. 

Enrique Mondragón Sánchez, del Colectivo Celaya por los Animales, dijo que es recurrente en todos los municipios la negligencia de los Ayuntamientos para hacer valer los reglamentos de la materia. 

“Porque la propia autoridad se rehúsa a hacer valer, pero son muchas veces ellos son los que violan el reglamento”, pues reclamó que desde 2018 se emitió el reglamento para evitar el maltrato animal pero no se cumple, a pesar de que esa organización ha insistido. (…) El maltrato animal se debería castigar, pero no se está haciendo”, reclamó.

Dijo que en Celaya hay dos o tres campañas de esterilización gratuitas al año, que son insuficientes. Por lo que sugirió que sean permanentes. “Y además educación, porque sin educación, esas campañas no van a tener efecto. (…) 

“El impacto en las poblaciones callejeras es nulo. El impacto de esas campañas es cero. También debería hacerse referencia a la permanencia de las campañas”. 

Sin presupuesto para las proyecciones en los municipios

Como respuesta, el diputado César Larrondo aclaró que el Congreso no puede hacer una ley para obligar a los municipios, porque ellos son libres de administrar su presupuesto.  

Sobre la petición de que se cobren los servicios veterinarios, dijo que hay gente que sí puede pagar la atención de sus perros, pero otros no, de tal manera que si se enferman,  no los llevan con el veterinario. 

“Así como hubo municipios que nos contestaron: así como quieren que hagamos las instalaciones, mándenos dinero. Hay que hacer las gestiones para conseguirlo”, planteó. 

El diputado Ernesto Millán Soberanes admitió que la iniciativa es muy noble, pero hay que ver la cuestión presupuestal, por ejemplo, mencionó que el Hospital Veterinario de León cuesta 43 millones de pesos, dinero que no tiene Xichú. 

Martha Ortega, presidenta de la Comisión de Medio Ambiente, reveló que solo 9 municipios de los 46 del Estado, tienen reglamentos actualizados. Y en el momento de la revisión, en Acámbaro se tenía actualizado el reglamento, pero en un año hubo dos personas que murieron por ataques de jaurías. 

Recordó que desde esta Comisión ya se exhortó a los municipios a que tengan espacios adecuados para atención de animales y actualización de los reglamentos. 

“Yo quiero ser muy clara: no hay recurso para la protección animal pero todos los municipios tienen para hacer fiestas. Yo no he encontrado ningún municipio que no tenga para hacer fiestas. Es cuestión de voluntad, no de falta de dinero”. 

Mencionó que hay municipios que no tienen un peso para esta materia, sino que son las asociaciones las que ponen de su bolsa.

“Si pensamos que los municipios no tienen dinero y que ellos tienen autonomía, no se va a hacer nada. Evidentemente no podemos obligar a los municipios, pero les hacemos exhortos y es una llamada de atención”, destacó la legisladora Verde.

Cuestiona ‘poner foco’ en animales

Luis Alberto Fernández Ferro, director del Centro de Control y Asistencia Animal de Guanajuato capital señaló que hay muchas enfermedades y pobreza en personas, por lo que cuestionó “¿voltear a ver como una prioridad la salud de los animales?, cuando debería ser prioridad la salud de las personas”.

“Hay muchas personas en pobreza. No se ha logrado mejorar las condiciones de bienestar general de las personas, entonces se me hace irrisorio que nos estemos preocupando por la salud de los animales”. 

Lo anterior lo expresó durante una reunión de los diputados de la Comisión de Medio Ambiente del Congreso con directores de los centros de control animal de cuatro municipios sobre la iniciativa para dar a los 46 municipios la obligación de crear clínicas veterinarias. 

Consideró que las clínicas veterinarias públicas serán una competencia desleal para los médicos veterinarios. Preguntó si habrá veterinarios que querrán ir a trabajar a los hospitales veterinarios públicos por 4 o 5 mil pesos, que es lo que pagan en los municipios. 

Señaló que la esterilización no logra el control de la población. “La esterilización no garantiza la sobrepoblación”. Sino que falta sensibilización de tenencia responsable. 

Mencionó que solo hay 8 centros de control animal en el estado. “No tienen idea del riesgo que representan estos centros”, como rabia por la mordedura de murciélagos.

“No es haciendo clínicas veterinarias como vamos a resolver la problemática de abandono”, destacó  Fernández Ferro.

Juan Luis Guzmán Rueda, director de Epidemiología de León, consideró que debe analizarse el impacto presupuestal que ocasionará a los 46 municipios la implementación, operación y administración de las clínicas veterinarias.

Señaló que contar con crematorios, como marca la iniciativa, es loable, pero insistió en que se debe tomar en cuenta la capacidad financiera y administrativa de los municipios. 

“En conclusión, se apoyan las iniciativas, se consideran loables las intenciones de dar estos servicios a las mascotas, pero hay que observar la capacidad de financiamiento de los municipios”, recomendó.

Enrique Ramírez Jiménez, coordinador del Centro de Control Animal de Celaya, mostró los servicios para perros y gatos que brindan, como vacunaciones, esterilizaciones, sacrificio con inyección, cremación, consultas generales, adopciones, y sus costos, aunque la vacunación es gratuita. 

También comentó que cada mes tiene como meta recaudar 50 mil pesos por esos servicios, y para ello debe realizar por lo menos 100 esterilizaciones con costo.  

Y que solo tienen capacidad para tener 100 animales, además de que un ciudadano ganó un amparo que les ordena no sacrificar perros en buen estado, por lo que las han estado dando en adopción. 

Comentó que hay que fomentar la tenencia responsable porque hay personas que tienen hasta 10 o 15 mascotas pero no pueden ni darles de comer ni limpiar. 

Sobre la iniciativa del hospital, la consideró buena, pero los hospitales no todos los municipios podrán tenerlos, solo los más grandes, por el costo. Además de que los sueldos de los trabajadores no podrán ser de 4 mil pesos, sino mayores.   

“La esterilización, tengo más de cinco años, seis años, pero yo realmente no veo que baje la sobrepoblación, porque el ciudadano debe ser el más responsable en esto”, advirtió. 

Otro funcionario de Celaya dijo que la gratuidad de estos servicios no siempre es valorada, por lo que no es viable.  

Javier Vega Cázares, del Centro de Control Animal de Acámbaro, mencionó que a ellos les falta un documento para hacer un acta de visita a los domicilios y eso los limita. “Hubo una vez que tuvimos que comprar un animal para poder rescatarlo”. 

 

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