Fue el 8 de enero de 1916, cuando el Centauro del norte le propuso a Zapata invadir Estados Unidos.
Entre 1913 y 1919, Francisco Villa y Emiliano Zapata intercambiaron más de veinte cartas. Pero hubo una en especial que nunca llegó.
Bajo el texto de: “Hemos decidido no quemar un cartucho más con los mexicanos y prepararnos y organizarnos debidamente para atacarlos en sus propias madrigueras”, enuncia el documento.
A dos meses de ser escrita, el mensajero, un Dorado de Villa, cayó muerto en la madrugada del 9 de marzo de 1916, en medio del ataque contra Columbus del Caudillo del Sur y medio millar de soldados.
Casi seis décadas después, la misiva fue redescubierta luego de ser remitida al Departamento de Estado norteamericano y pasar por los Archivos Nacionales en Washington D.C.
La historia de la carta se basa en parte en la narrativa de un agente secreto del Departamento de Estado de Estados Unidos llamado George Carothers, quien afirmó haber interceptado una carta de Villa a Zapata en la que se discutía una posible invasión a Estados Unidos.
Sin embargo, muchos historiadores han cuestionado la autenticidad de esta carta y han sugerido que puede haber sido un montaje o una exageración por parte del mismo Ahente Carothers o de otros interesados en crear tensión y conflicto entre Estados Unidos y México.
Fue entonces cuando algunos historiadores la retomaron como un documento relevante para entender la Revolución Mexicana. Algunos dicen de ellos dicen que la respuesta de Zapata hubiera sido negativa.
Historiadores como Armando Ruiz Aguilar destacan que la zona segura de acción de Zapata era “Morelos, Puebla y el estado de México (centro del país)”, además de que el desplazamiento hacia el norte “habría sido muy costoso”. Y aunque algunos sospechan que la carta pudo haber sido también “sembrada” por el propio gobierno estadounidense, Ruiz Aguilar y otros, abogan por la relevancia histórica del documento, pues incluso si no es verdadera “por lo menos muestra la manera en que se realizaban los movimientos y estrategias políticas de aquella época”.
En realidad, es más probable que la idea de una invasión conjunta de Villa y Zapata a Estados Unidos sea un mito o una exageración.
Aunque tanto Villa como Zapata eran líderes revolucionarios que se oponían al gobierno de Venustiano Carranza en México, no hay pruebas sólidas de que hubieran planeado una invasión conjunta a Estados Unidos por diversos factores.