Ochenta bolsas de plástico fueron halladas en el estómago de una pequeña ballena piloto que murió en el sur de Tailandia tras vómitos y convulsiones, que le provocaron el haber ingerido más de 80 bolsas de plástico.
El cetáceo fue encontrado moribundo el lunes en la provincia sureña de Songkhla, Tailanda y pese a los esfuerzos de un equipo de veterinarios que hicieron todo lo posible para salvarlo, el animal murió después de vomitar cinco bolsas.
La autopsia del cetáceo reveló que su estómago estaba obstruido por 80 bolsas de plástico y otros artículos de un peso total de ocho kilos, los cuales le impedían realizar sus funciones digestivas normales. Situación que nos recuerda la importancia de erradicar el uso de plástico y el grave problema que su presencia lleva consigo a los océanos del mundo y la población marina.
Por su parte, Thon Thamrongnawasawat, biólogo marino en la Universidad Kasetsart de Tailandia explicó que las bolsas impedían a la ballena.
El cetáceo fue rescatado tras ser avistado el lunes 28 de mayo flotando inerte e incapaz de nadar en el canal de Songkhla, pero acabó muriendo el último viernes por la obstrucción intestinal, de acuerdo a datos proporcionados por la agencia EFE.