“Con una buena canción, todos pueden cambiar”, y así fue para los 60 adolescentes que conforman la Orquesta Sinfónica de la Huasteca Hidalguense, proyecto que comenzó en junio de 2017 con apoyo de la Fundación Miguel Reyes, radicada en el municipio de Tlaxcoapan.
La orquesta conformada en su mayoría por mujeres (alrededor de 38 jóvenes), rompió esquemas al tener una agrupación que incorporó instrumentos que normalmente no se tocan en esa zona de Huejutla, sobre todo, los instrumentos de viento-metal, como la tuba o trompeta que son tocados por niñas, comentó Miguel Reyes López, titular de la Fundación.
Al comienzo, la idea causó sensación y llegaron más de 200 jóvenes provenientes de Huejutla, Jaltocán, comunidades vecinas de Veracruz, Tantoyuca y otros; pero conforme pasó el tiempo, varios se fueron quedando en el camino y al final solo 60 terminaron el proyecto, comentó.
En entrevista con AM Hidalgo, el gestor informó que el proyecto tuvo una duración de un año y se contó con el recurso suficiente para pagar a los maestros, instrumentos, incluso, hasta un traje para cada uno de los integrantes.
“Llegar a Huejutla y sentir el calor de su gente, ver la forma en la que acogieron el proyecto y cómo la música marcó pautas en las vidas de los niños, es algo que no tiene precio. Es un proyecto que permitió sensibilizar a través del arte, que la gente tuviera acceso a clases gratuitas de música porque no cualquiera puede pagar y menos por un año”, comentó Reyes López.
Insistió en que “la idea no es formar músicos, sino dar un nuevo enfoque a la vida de los pequeños, hay quienes incluso comentan que su instrumento permite que otros los escuchen sin necesidad de palabras y aprendieron disciplina y que con esfuerzo todo se puede lograr”.
El proyecto culminó en junio de este año y aunque hasta ahí queda el acompañamiento de la organización, los padres de familia y autoridades de la secundaria Antonio Reyes, a la cual se le donaron los instrumentos, se están organizando para dar continuidad al proyecto.
Asimismo, comentó que algunas vivencias del proyecto se mostrarán a través de un documental que corre a cargo de Hazael de la Cueva, aquí pueden ver un adelanto:
Por último, destacó que aunque la organización tiene su domicilio en Tlaxcoapan, en el valle del Mezquital, están gestionando para llevar proyectos a diversas partes del estado.