Mientras el subsecretario de gobierno, Gerardo Canales Valdez, asegura que maestros y alumnos de la escuela de Coamila trabajan con normalidad desde el lunes pasado; por otro lado, el secretario local de Huejutla, Sotero Ramírez, indicó que se mantiene el diálogo para que los niños de preescolar retomen clases en ese espacio de educación indígena en la Huasteca.
Los funcionarios coincidieron en que el conflicto con delegados y habitantes de las comunidades Coamila, Rancho Nuevo y Octlamecayo tendría su origen en una disputa familiar y no en un tema religioso.
Al respecto, Canales Valdez refirió que “a partir del lunes están trabajando normalmente en la primaria y preescolar, hemos llegado acuerdos donde los problemas de adultos no lleguen a los niños y ya están laborando de manera normal alumnos y maestros”.
Por otra parte, Sotero Ramírez puntualizó: “Están viendo esa situación porque no quieren permitir a varios niños entrar al preescolar, pero tratamos que los adultos entiendan que los menores nada tienen en este conflicto donde limitan el derecho que tienen a la educación, inscrito en el artículo tercero constitucional”.
Ninguno de los servidores públicos mencionó que el conflicto en Coamila sea provocado por intolerancia religiosa. Únicamente comentaron que están envueltos católicos y evangélicos, pero reiteraron que el origen del problema son diferencias entre integrantes de una sola familia.