La detención de Gerardo Sosa Castelán, presidente del patronato de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), “trae esperanza” a Morena, ya que así comenzarán a recuperar los espacios impuestos a los militantes.
“Con la aprehensión de “la Sosa Nostra” se detiene ese proceso en el que los dirigentes de Morena estaban entregando el partido al grupo universidad. Aunque el daño está hecho, ya no va a tener la misma fuerza”, expresó Francisco Patiño Cardona, consejero estatal y fundador de Morena en Hidalgo.
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En entrevista, el también exaspirante a la alcaldía de Mineral de la Reforma, recordó que en el proceso interno de selección de candidatos a los municipios “hubo un entreguismo al grupo universidad, como pasó en las diputaciones locales, pero hoy su detención (Sosa Castelán) nos da esperanza de recuperar el partido”, agregó.
Por ello, pidió a los militantes “cien por ciento de Morena, estén muy atentos en la contienda interna para renovar la dirigencia estatal, para que ese grupo que fue semicontrolado por la “Sosa Nostra” ya no venga a controlar el partido, porque lo han dejado en muy mala situación”.
Patiño Cardona informó que este fin de semana realizó, junto con otros morenistas, un recorrido por municipios de la Huasteca hidalguense, donde recogió inconformidades por la imposición de candidatos a las presidencias municipales.
Específicamente, militantes morenistas de Huejutla, San Felipe Orizatlán, Yahualica, Atlapexco y Huautla, señalaron directamente a los secretarios de Organización, Luis Enrique Cadena García; de Formación Política, Carlos Mendoza Álvarez; al presidente del concejo estatal, Andrés Caballero Cerón, y al consejero nacional, Martín Sandoval, de traicionar a las bases.
“Aquí se está viviendo crúdamente esta situación de las imposiciones de candidaturas. El sentimiento de rechazo es muy fuerte hacia estos personajes y también a la “Sosa Nostra”, pues hasta allá también llegaron las impugnaciones”, expresó.