Quitarse el condón durante el acto sexual sin consentimiento mutuo sería una práctica castigada con penas de entre dos y cuatro años de prisión, según pretenden diputadas y diputados del Congreso de Hidalgo; además, habría posibilidad de aumentar la sanción en caso de que dicha conducta tenga consecuencias para la víctima como infecciones o embarazo no deseado.
Mediante una iniciativa presentada este lunes en el pleno del Congreso local, las y los legisladores de Morena, Partido del Trabajo y Nueva Alianza, condenaron dicha práctica conocida como “stealthing”, consistente en retirar el preservativo sin consentimiento de la pareja mientras sostienen relaciones sexuales.
El texto leído por la legisladora del PT, Tania Valdez Cuéllar, indicó que realizar dicha acción puede considerarse como agresión sexual o incluso violación, ya que menoscaba la dignidad de las personas.
“El término anglosajón denominado “stealthing” refiere a la acción de quitarse el condón durante la cópula sin el consentimiento de la otra persona, si bien la traducción literal puede significar en sigilo o secretamente, hace referencia a una práctica que pretende pasar inadvertida por la otra persona y, por ende, sin ningún tipo de consecuencia”, externó la legisladora Valdez Cuéllar.
De acuerdo con la iniciativa, existen antecedentes sobre las penas por las agresiones antes señaladas, como en Alemania en 2016, donde el tribunal de Berlín condenó a ocho meses de prisión y pago de una multa de 3 mil euros a un hombre que durante el acto sexual decidió quitarse el preservativo contra la voluntad de su pareja.
Ante esa situación, la iniciativa hoy presentada en Hidalgo busca penas de prisión de dos a cuatro años para quien incurra en la falta señalada, sanción que aumentará en caso de impactar la salud de la pareja por infecciones, enfermedades venéreas o embarazo no deseado.