En lo que va de la actual administración estatal se han iniciado 285 carpetas de investigación por delitos en contra de niñas, niños y adolescentes de Tizayuca, Tolcayuca, Villa de Tezontepec y Zempoala.

Karina Ramírez Jiménez, procuradora de Protección de Niñas, Niños, Adolescentes y Familia del DIF estatal, informó que los principales delitos son violencia familiar, incumplimiento de obligaciones de carácter familiar y violencia sexual. 

“Son denuncias formalizadas ante el Ministerio Público donde nosotros brindamos el acompañamiento, la representación jurídica a niñas y niños, y la investigación del caso está a cargo del Ministerio Público”, refirió.

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645 MENORES CON MEDIDAS DE PROTECCIÓN

La funcionaria estatal presentó un informe de acciones correspondiente a la región 6 de los DIF municipales de los cuatro municipios mencionados, donde precisó que determinaron 642 medidas especiales de protección y cinco urgentes.

“Es decir, el resguardo y cuidado de niñas y niños en centros de asistencia social dependientes del Sistema DIF Hidalgo”, explicó.

Precisó que la Procuraduría de Protección atendió 343 niñas y niños en protección y resguardo, derivado de 446 reportes recibidos por esa situación.

INTEGRACIÓN DE CARPETAS 

En total, dijo, la institución suma mil 968 seguimientos a la atención, acompañamientos a las autoridades, verificación que estén incorporados en aspectos de salud o educativos.

Respecto de las 285 denuncias, detalló que actualmente están en etapa de integración de las carpetas, de las que se desprenderán las diligencias correspondientes.

Indicó que si las estancias infantiles del DIF como Centros de Atención Infantil Comunitaria (CAIC), o los Programa de Atención a Menores y Adolescentes en Riesgo (Pamar) detectan algún menor violentado, se da aviso a la Procuraduría para que intervenga.

SEGUIMIENTO DE UNIDAD MUNICIPAL

Ante las titulares de los DIF municipales de Tizayuca, Tolcayuca, Villa de Tezontepec y Zempoala, indicó que la unidad de primer contacto municipal es la que debe detectar y dar seguimiento a dichos casos.

“No basta que se detecte el caso y avisen a las subprocuradurías regionales, sino que deben emprender acciones de atención y seguimiento, para garantizar y salvaguardar la integridad, libertad, seguridad de niñas y niños en esa situación”, señaló.

 

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