Trabajadores de obras públicas municipales rellenaron con chapopote y asfalto las hendiduras del viaducto Nuevo Hidalgo de Pachuca.

Con ello simultáneamente y sin pretenderlo construyeron topes viales en serie de regular tamaño.

Esto debido a que las obras generaron montículos en las hendiduras y pequeñas zanjas que se han formado entre losa y losa.

BRINCOS Y SACUDIDAS

La observación la hacen conductores de vehículos particulares, lo mismo que pasajeros del servicio público que dicen que el viaje se hace entre saltos y sacudidas al pasar sobre los bordes de asfalto ubicados a ocho o diez metros uno del otro, desde la calle Julián Villagrán hasta Belisario Domínguez.

CAMINO PAREJO

Según algunas opiniones debieron emparejarse los rellenos de asfalto para que no sobresalieran sobre el resto de la superficie pues generan incomodidad en viajes.

RIESGO EN ESA VIALIDAD

En otras oportunidades, el urbanista y arquitecto Luis Corrales Vivar ha señalado que se requieren trabajos de mantenimiento a fondo en esa vía que se puede desplomar por no estar diseñada para soportar el tráfico intenso de vehículos del transporte público ni de camiones pesados.

CONSTRUIDA HACE 40 AÑOS

El cronista del Centro Histórico ha insistido en la necesidad de una revisión a fondo de esa estructura construida hace más de 40 años.

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