A los 57 años, sin la agilidad de antaño, caminando con cierta pesadez, vestido de negro y con semblante de cansancio, el Vampiro Canadiense fue despedido en medio de ovaciones en la Arena Afición de Pachuca.
Dijo que los médicos le han advertido que cualquier mal golpe lo pueden dejar paralítico debido a la enfermedad que le fue diagnosticada hace dos años que lo mantuvo por un tiempo en silla de ruedas.
LA ARENA ESTABA DE BOTE EN BOTE
Pero eso no fue obstáculo para que en una atestada arena afición y haciendo pareja con Octagón Junior se enfrentara contra Abismo Negro y la Parka Negra, en una lucha que se trasladó entre el público que ocupaba las gradas.
FUEGO Y MARIACHI
En la noche del jueves primero de agosto se desarrolló un espectáculo memorable en que hubo fuegos artificiales y mariachi para regocijo de los espectadores, entre ellos cientos de niños.
Hubo lleno total en la casona de la avenida Cuauhtémoc de un público ávido de divertirse y emocionarse y que salió satisfecho con creces tras una serie de luchas en que hubo risas y gritos eufóricos de la concurrencia y los luchadores.
3 HORAS DE FUNCIÓN
Ninguna lucha decepcionó. Todas, todos y todes los luchadores, incluido el delicado Máximo, dieron todo para divertir y enardecer al público durante más de tres horas.
QUE NO SE ENTERE LA FIFA
La palabra a coro prohibida en los estadios (Eeeeh….) es permitida y celebrada en las arenas, y se repitió en varias ocasiones en la última función.
LUCHA ADICIONAL
Como parte del menú se presentó una feroz lucha fuera de programa que protagonizaron Máscara 2000 y El Oriental, que pactaron una revancha cabellera contra cabellera.
En la lucha estelar a una sola caída, extenuado el Vampiro Canadiense y su compañero Octagón Junior, terminaron por vencer a la Parka Negra y Abismo Negro.
DESPEDIDA
Cojeando por algún golpe que recibió durante el espectáculo, Ian Hodgkinson, nombre real del Vampiro, tomó el micrófono para despedirse del público pachuqueño.
Durante más de 40 años se dedicó a la lucha libre a la par con la música, el canto y la actuación.
Recordó que cientos de veces estuvo en la Arena Afición de Pachuca.
NO HAY QUE RENDIRSE
“Alguien puede estar viviendo cosas difíciles, depresiones, dificultades, pero sólo es una fase, no hay que rendirse”, expresó el Vampiro Canadiense antes de retirarse en medio de una multitud.