Desde julio pasado, mujeres y algunos hombres del barrio Ixtlahuatempa, en Chililico, comunidad del municipio Huejutla, elaboran las piezas de barro que serán vendidas antes y durante el Xantolo, que para alfareros inicia el 23 de octubre y concluye el 31 del mismo mes.
Minerva Guillén Hernández mencionó lo anterior, mientras teñía algunas ollas y copaleros con pintura vinílica y una “pluma de gallo” que usa en lugar de una brocha o el pincel para dar color a las piezas que elabora con el barro que compran en sitios cercanos.
Doña Minerva recordó que por más de 40 años ha trabajado el barro y dijo que esta actividad la aprendió “solo mirando” a su abuela y madre que también fueron alfareras como mucha gente en el barrio Ixtlahuatempa y otros de Chililico.
Refirió que gracias a esa actividad artesanal ha salido adelante en compañía de su familia.
LEE TAMBIÉN: Ven comerciantes en Xantolo oportunidad para mejorar ventas
PROCESO ARTESANAL
Explicó que el proceso de elaboración de piezas de barro comienza con la compra de la materia prima y lamentó que ha subido mucho de precio, pues ahora solo le alcanza para un viaje por año, cuando en años anteriores pagaba fácilmente dos o tres.
“Antes pagaba 800 pesos por un viaje y ahora está arriba de mil pesos”, detalló la artesana.
Precisó que no cualquier tierra puede utilizarse para elaborar las ollas y otras figuras, ya que al tener el barro lo deben colar y después separar hasta que está listo para comenzar a darle forma de caballitos porta velas, silbatos con forma de animales, copaleros y ollas.
Esas piezas después deben secarse bajo los rayos del sol, antes de entrar al horno para ser cocidas durante cuatro horas, “solo dos tareas de leña para evitar que se quemen”, mencionó doña Minerva.
Luego de cocer las figuras de barro, continuó, toca decorarlas con pintura vinílica que es distribuida en las piezas con una “pluma de gallo”, que suple pinceles y brochas pequeñas.
Recordó además que antes lo hacían con pintura de tierra natural que compraban en poblados de Veracruz.
CARECEN DE APOYO GUBERNAMENTAL
Minerva dijo estar feliz de ser alfarera de Chililico, pero señaló que les falta ayuda de autoridades de los tres órdenes de gobierno, pues aunque sus piezas tienen la calidad para llevarlas a otros sitios del país e incluso al extranjero, carecen del apoyo para hacerlo.
TE PUEDE INTERESAR: Instalarán altar especial para víctimas de COVID durante Xantolo en Huejutla
Comentó que incluso en algunas ocasiones ha representado a Hidalgo en otras entidades donde ha puesto en alto el nombre de Chililico al conseguir primeros lugares en la categoría de ollas de barro y otras figuras.
Mencionó también que su trabajo es muy cotizado y que tienen figuras desde diez hasta 3 mil pesos, pero lamentó que en el comercio local la gente regatea mucho el precio de sus productos sin tomar en cuenta que son piezas únicas.
MANTENDRÁ LA TRADICIÓN
Doña Minerva destacó que como en toda actividad la alfarería también tiene su riesgo, sobre todo cuando se cuecen las piezas de barro en el horno que es activado con lumbre de leña.
No obstante, aseguró que no dejará de trabajar con barro, pues considera que esa actividad artesanal distingue a las mujeres y hombres de Chililico que enseñan la técnica a las nuevas generaciones que serán las y los responsables de atender a los clientes durante el Xantolo.