León, Guanajuato.- Sin tener una armadora de vehículos, Querétaro se ha convertido en uno de los principales proveedores de
autopartes y servicios para la industria automotriz.

Y el fenómeno del “nearshoring” puede generar compras en componentes y servicios en el estado hasta por 4 mil 500 millones de dólares, en los próximos años.

René Mendoza, presidente nacional de la Cadena de Proveedores de la Industria en México (Capim), dijo que el proceso de la entrada en vigor de las reglas de origen al 75%, el nearshoring y los altos costos logísticos de Asia, han generado que se lleva a cabo “una cacería de proveedores en México”.

Por lo que estima que hay más de 100 empresas con potencial de intervenir en estos negocios. “Están buscando arneses, die casting, estampado metálico, forja, fundición, acabados superficiales, herramentales, maquinado, inyección de plástico, inyección
de aluminio, troqueles y laminado”, comentó Mendoza en un seminario organizado por la Industria Nacional de Autopartes (INA).

Entre las 100 empresas en búsqueda de proveedores de estos materiales y servicios están Stellantis, KIA, Ford, BMW, Mercedes-Benz, Honda, Bosch, Daimler, Continental, ZF, Kenworth, John Deere, Martin Rea, Lear, Eaton, Caterpillar, Visteon y Vitro.

Las 100 empresas consumen 65% de la demanda de compra de autopartes y servicios en el país, ya que tienen operaciones en toda la República.

SM

 

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