León, Guanajuato.- Alrededor de la creciente industria de vehículos eléctricos se abren varias oportunidades de negocio para proveedores y fabricantes en diferentes ámbitos.
De los más beneficiados son los proveedores de activos tecnológicos, como los fabricantes de cargadores y las compañías que los instalen, empresas de energía y operadores de redes de carga, señaló Daniel López, director comercial de Evergo, red de carga de vehículos eléctricos de México y Latinoamérica.
La creciente popularidad de la movilidad eléctrica presenta un potencial inigualable a un nuevo ecosistema conformado por empresas de tecnología, manufactura, servicios y comunicaciones.
“Los pioneros en México que puedan encontrar la propuesta adecuada y tomar la delantera en la infraestructura de vehículos eléctricos, colaborando en todos los ecosistemas, pueden aprovechar una ventaja competitiva considerable”, detalló.
No obstante, advirtió que los proveedores nacionales deben actuar de manera rápida antes de que empresas globales se establezcan en México y puedan llenar los vacíos que vayan surgiendo.
Para Miguel Elizalde, presidente de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), cada vez más la sociedad va a elegir vehículos eléctricos.
A nosotros no sólo la sociedad nos exige reducir las emisiones del vehículo, sino también de la fabricación del vehículo”, refirió.
Uno de los frenos que enfrenta el consumidor al elegir un vehículo eléctrico e s la autonomía de su batería, ya que México todavía no cuenta con un gran número de electrolineras.
Para el caso de la industria de tractocamiones en México el desafío será seguir destacando, pero ahora en las versiones cero emisiones. “Ahorita México es el exportador número uno de tractocamiones en el mundo con vehículos de combustión interna”.
El gran reto es ¿cómo vamos a mantener ese liderazgo mundial, pero con vehículos cero emisiones?, ese va a ser el reto y va a haber oportunidades, por eso estamos viendo muchas inversiones de nearshoring dentro de la industria automotriz”, detalló Elizalde.
Pero los avances tecnológicos han ampliado la capacidad de la batería de los vehículos eléctricos para distancias más largas siendo la autonomía estándar del mercado cercana a los 400 kilómetros y llegando hasta los 700 kilómetros por carga completa.
SM